COLUMNA DE:
Angel Manero

Angel Manero

Ingeniero Agroindustrial con Maestría en Administración de Agronegocios. Consultor senior en Desarrollo Productivo y Negocios Agrarios.
23 marzo 2018 | 09:41 am Por: Angel Manero

Agro; para venderte mejor

Agro; para venderte mejor
Hace un par de semanas los productores de San Martin se quejaban del bajo precio del maíz (0.35 soles/Kg en chacra) y el mismo día el precio internacional estaba alto -se cotizaba en 380 USD/TM- es decir un precio suficiente como para pagar 0.80 soles /Kg en chacra a los agricultores. La distorsión anterior se debe a que existe un tiempo aproximado de 90 días de ajuste del precio nacional en función de la cotización internacional del producto.

Los pequeños productores de maíz, arroz, trigo, cebada, algodón, menestras y otros productos no perecibles carecen de logística de almacenamiento y acceso a derivados financieros que permita warrantear la cosecha a la espera de mejores precios.

Según el censo del año 1994, el Perú tenía 1.72 millones de hectáreas (Has) bajo riego, esta cifra aumenta a 2.57 millones de Has en el censo del 2012. Es decir, en 18 años se ha asegurado el riego a cerca de 0.8 millones de Has. Un predio que antes se regaba por secano o con excedentes temporales, al pasar a tener disponibilidad de agua aumenta su cosecha en más del 100% y por lo tanto incrementa la oferta de productos al mercado.

En las últimas dos décadas, el Estado en sus tres niveles de gobierno ha invertido un promedio anual de S/ 1,000 millones en infraestructura de riego, lo que implica irrigar cerca de 50 mil nuevas hectáreas cada año. Este proceso se da en paralelo al desarrollo de infraestructura vial en el país, lo cual permite el tránsito más fluido y a menor costo de los productos hacia los mercados.

Hasta aquí todo bien, el problema está en que nuestra población solo crece 1% y la economía en cerca de 3% cada año. La demanda interna no crece con la misma intensidad con la que está creciendo la oferta de productos agropecuarios y ya vemos los problemas en papa, maíz, arroz, zanahoria etc.

Pese a lo anterior, se dan algunos casos de precios altos por limitada oferta, lo cual evidencia la necesidad de un mejor sistema de información para tomar decisiones de siembra. También necesitamos hacer más innovación para seguir diversificando la canasta productiva.

Existen experiencias de pequeña agricultura organizada y articulada a los mercados internacionales como el banano, mango, café, cacao, quinua, cítricos, palta y otros que representan cerca de 200 mil Has, lo cual es muy importante y es necesario apoyar en eficiencia y sostenibilidad a estas cadenas de valor; sin embargo, el grueso de la pequeña agricultura (2 millones de Has) abastece al mercado interno.

La pequeña agricultura requiere engancharse mejor con el mercado y para ello es importante promover los sistemas de información, una mayor articulación a mercados internacionales, reconversión productiva y promoción del consumo de nuestros productos en el mercado interno. Un aumento de la demanda del 10% en cualquier producto es lo mejor que le podría pasar a la oferta.

La mejora de los precios genera un crecimiento espontáneo de la productividad (se pone mayor atención y disposición a invertir en la plantación) hasta cierto punto; de allí es necesario más tecnología. Mejores precios catalizan mayor productividad y empieza el circulo virtuoso de mayores ingresos: con más capital, más tecnología aumenta la productividad siempre que haya a quien vender razonablemente.