27 febrero 2019 | 08:57 am Por: Edwin Ramos | prensa@agraria.pe

Entrevista con Alexander Bonifacio, gerente general de la empresa

Orbes Agrícola proyecta alcanzar 10 por ciento del mercado de cintas de riego con su nueva propuesta de ingeniería peruana

Orbes Agrícola proyecta alcanzar 10 por ciento del mercado de cintas de riego con su nueva propuesta de ingeniería peruana

Con “Inca Drip”, su más reciente apuesta, la empresa se encuentra desarrollando pruebas de alta resistencia en la zona de Pedregal, donde el agua es de mala calidad. Espera seguir en la senda de crecimiento tanto con el riego tecnificado como con la entrega de maquinaria agrícola. 

(Agraria.pe) Con 20 años en el mercado, Orbes Agrícola trabaja para consolidarse en sus frentes tecnológicos más importantes: el uso racional del agua con riego tecnificado y la mecanización agrícola.

Alexander Bonifacio, fundador y gerente general de la empresa, revela que este desarrollo del mercado se ha dado en un contexto en que la agroindustria permite crecimientos anuales superiores al 10%, en tanto que la pequeña agricultora (tradicional) sigue adoleciendo de una buena adaptación tecnológica.

“A lo largo de estos 20 años, nuestros crecimientos han sido exponenciales pues la gente está muy interesada en los sistemas de riego; aunque los últimos años sí el crecimiento ha sido más lento, un promedio de 5% a 7% anual. Entonces, al encontrar este estancamiento desde 2011 en nuestro plan de crecimiento tuvimos la incorporación de maquinaria agrícola y en adelante trabajamos también con la provisión de tractores agrícolas, motocultores, implementos y equipos de fuerza, con lo que hemos ido creciendo”, explica. 

Gracias a esta propuesta, agrega, Orbes Agrícola se ha posicionado como la cuarta empresa más importante en provisión de maquinaria para el sector en el país, siempre con el apoyo en paralelo de la división dedicada a los sistemas de riego. Sus clientes corresponden en un 60% a la mediana agricultura, aunque también se adaptan a los más pequeños y de gran calado. 

Nueva cinta con ingeniería peruana
Una de las principales novedades que la empresa ha lanzado al mercado local es la cinta para riego “Inca Drip”, que ha sido maquilada especialmente para Orbes Agrícola con diseño de ingeniería peruana. Alexander Bonifacio resalta que se trata de cintas altamente resistentes a la obstrucción y que pueden trabajar incluso con aguas de mala calidad. Para probar estas capacidades, funcionalidad y resistencia, la empresa está haciendo pruebas con ellas en la zona de Pedregal (Majes, Arequipa) donde el agua no es buena y las presiones de funcionamiento son relativamente bajas. 

“Los goteros son planos, tipo pastilla, y vienen trabajando perfectamente hasta este momento. Ya se encuentra liberado al mercado, se lanzó en julio del año pasado y se hicieron varias presentaciones con resultados muy favorables”, detalla. 

Entre sus principales ventajas, apunta al área de filtración que evita la obstrucción, así como el moldeado de los goteros con buen perfil vertical y horizontal. Esto, además de  un laberinto que permite generar alta turbulencia en la línea de paso del agua. Se encuentra en presentaciones desde clase 6 mil a 20 mil y para caudales de 1, 1.3 y 1.6 litros por hora por gotero y espaciamientos de 20, 30 o 40 centímetros (o con preparaciones especiales según pedido del cliente). 

Con esta propuesta, la empresa proyecta alcanzar una participación en el mercado de cintas de riego de 10%, haciéndose así de un lugar entre otras alternativas que ingresaron hace muchos años, pero ante las que destaca por sus ventajas no solo en diseño sino en resultados gracias a la máxima uniformidad de aplicación, el uso de caudales exactos y en longitudes largas.

Actualmente, sostiene el ejecutivo, la mayor zona de reposición de estos productos es Pedregal (Arequipa), donde se han posicionado bien, sin embargo está en planes alcanzar el máximo potencial comercial en toda la franja costera del país, especialmente las zonas de Paracas, Villacurí, Chepén, Lambayeque y Piura. “Nos gustaría mucho experimentar en Chinecas, donde hay muy mala calidad de agua”, dice. 

Contexto 
En líneas generales, Bonifacio refiere que los tres últimos años han sido complicados comercialmente, lo que no ha impedido que la empresa siga creciendo. Hacia el futuro inmediato lo anima que el mercado de agroindustria se muestra con gran crecimiento en más campos de arándanos, uvas, paltos y hortalizas. Espera además que todo este ímpetu alcance a los productores del Ande y la Amazonía, quienes necesitan mucho del uso de nuevas tecnologías para que las perspectivas de crecimiento en general de la agricultura peruana sean realmente grandes.