Agregó que se trabaja para que estos sectores sean pieza central en la cadena comercializadora sin aprovechamiento de intermediarios. Expresó además la necesidad de mejorar la inocuidad hacia el mercado interno y acceso al agua de mayor calidad.
(Agraria.pe) Algunos gremios de pequeños productores han planteado que la agroindustria no está ofreciendo un crecimiento equitativo a todos los participantes del sector agrícola peruano. Pablo Quijandía, viceministro de Políticas Agrarias del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), cree en cambio que hoy es cuando estos beneficios empiezan a verse, y tiene casos de referencia para demostrarlo.
“La pequeña agricultura ahora y con un ritmo paulatino, está entrando en el mercado de exportación. El primer ejemplo que tenemos es la quinua, que es producida por pequeños productores, eso va a la exportación, especialmente la orgánica. Otro producto de pequeña agricultura es la palta, que es sembrada por pequeños y medianos agricultores que trabajan por contrato con packings y están exportado; es algo que como ministerio estamos tratando de estimular”, comentó para Agraria.pe.
El objetivo de las políticas de su sector, agregó, es que los pequeños productores en general sean incorporados cada vez más en las cadenas de producción como actores reales, sin el aprovechamiento de intermediarios. Para ello, destacó, se requiere de una agricultura moderna, seria y con productos orgánicos de calidad, lo que implica tecnificarse, un proceso que se estaría dando poco a poco.
En esa línea, destacó que el trabajo que vienen realizando con grupos multisectoriales como la Comisión de Agricultura Familiar, que está elaborando un plan de estímulo que involucra los temas de salud, educación y comunicación (que incluye caminos y carreteras); y la Comisión Multisectorial Alimentaria.
Inocuidad para mercados internos, agua y actualidad
Otro punto en que incidió Quijandría es la necesidad de trabajar en la inocuidad de los alimentos para el mercado interno tal y como se hace con los productores que exportan y cumplen todos los protocolos sanitarios. En ese aspecto, resaltó el gran desafío que implica el tema de la contaminación del agua tanto para consumo humano como para la actividad agrícola.
“El Presidente habla de abastecer al 100% de la población con agua potable hasta el 2021, eso no es solo que la población tome agua potable sino que haya agua de mejor calidad para el riego, y esa es una tarea que se viene haciendo con una inversión muy grande para los próximos cinco a seis años, estamos empezando. Si se llega a cumplir la meta del Ministerio de Vivienda en cuanto al abastecimiento de agua, automáticamente como agricultura vamos a tener agua mucho más saludable para producción”, sostuvo.
Agregó que un segundo plano de este trabajo es la supervisión del Senasa en el uso de agroquímicos para que no afecten la salud de la población.
Finalmente, el viceministro abordó dos temas en boga como son la posible renovación de la Ley de Promoción Agraria y el Plan de Reconstrucción con Cambios. Sobre el primero, señaló que si bien hay gremios como Conveagro que están en contra de renovar la vigencia del instrumento, lo cauto es realizar una evaluación –que su despacho se compromete a hacer- del impacto que ha tenido en todos estos años la medida antes de tomar una decisión. Sobre los dineros para la reconstrucción dijo confiar en que las cosas se hagan mejor en adelante en cuanto a infraestructura de riego y manejo de cuencas, además de la ubicación de las familias en zonas que no sean peligrosas a futuro.
“Agricultura ya presentó su plan a la oficina de Reconstrucción, que tiene que ver con todas las cuencas que salen al Pacifico y esperamos que todas esas obras se puedan completar”, señaló.