09 noviembre 2021 | 09:27 am Por: Redacción

Señaló Juan Ignacio Allende, gerente general corporativo de Hortifrut, la mayor productora mundial de arándanos

Hortifrut y su plan para seguir creciendo con adquisiciones: “Sí, va a continuar. Decir que no sería ir contra el ADN de Hortifrut”

Hortifrut y su plan para seguir creciendo con adquisiciones: “Sí, va a continuar. Decir que no sería ir contra el ADN de Hortifrut”
Al acuerdo anunciado esta semana en España se han ido sumando otros proyectos de compras e inicio de operaciones productivas en Ecuador, Portugal —para producir en la zona de Odemira—, e incluso en Chile, con una reciente compra a Cristoph Schiess.

(Agraria.pe) Producir en contenedores en las ciudades, licenciar el material genético de sus variedades de punta, y por cierto, crecer con nuevas adquisiciones, están en el pipeline de Hortifrut, la mayor firma productora de arándanos del orbe y la segunda en el mundo si se consideran todos los berries, que esta semana clavó una nueva bandera en el mapamundi.

El lunes anunció una compra en España, por la friolera de US$ 280 millones. Se trata de la firma Atlantic Blue, ligada a los empresarios Ulf Hayler y José Antonio Ruix, que ya tenía relación comercial con Hortifrut, pero que era 100% de aquellos socios.

Hortifrut —ligada a un grupo de empresarios chilenos, la familia Moller, Eduardo Elberg, Ignacio del Río y el grupo peruano Quevedo— completa presencia en 10 países con actividad productiva: Chile, Perú, Argentina, Colombia, Ecuador, México, Estados Unidos, Marruecos, España y China, llegando a unas 5.300 hectáreas propias, a lo que se suman otras tres mil arrendadas.

La adquisición anunciada tiene varias 'gracias' para Hortifrut. Hasta ahora la compañía solo contaba en España con un campo de 85 hectáreas, del que eran dueños en 50%, y ahora con la compra acordada —fuera de sumar 850 hectáreas que incluyen tierras productivas en España, Marruecos y Perú—, la operación los hará acceder a otros activos importantes : completa el 100% de la comercializadora Euroberry Marketing (Hortifrut ya tenía el 50%), instalaciones de packaging (de las que Hortifrut solo tenía el 17,5%), y además comprar el 100% de Royal Berries, compañía que les permitirá lanzarse con todo al mundo del licenciamiento de la genética a terceros productores.

Hasta ahora con Atlantic Blue, Hortifrut tenía un acuerdo de licencia de variedades muy potentes y conocidas (la Rocío y la Corona), pero solo para plantarlas en América. Tras la compra, Hortifrut podrá plantar y licenciar estos productos en todo el mundo, pues serán dueños de estas variedades. Para entender la relevancia del desarrollo genético que podrán manejar en el mundo, Allende lo grafica con una analogía del mercado de las paltas: 'La gente no quiere comer la variedad fuerte, quiere comer Hass', explica. Y continúa: 'Vamos a poder abrir nuestra genética a terceros, a poder invitar a productores, refiere Allende.

¿En qué se traduce todo esto? En nuevos y más flujos para Hortifrut, por el royalty cobrado a los terceros productores y porque estas alianzas conllevan también acuerdos de comercialización exclusiva, con el consecuente pago de comisiones. Esta área de genética era un incipiente negocio que estaba desarrollando Hortifrut. En la temporada 2019, le había generado el 4,5% del ebitda y a la siguiente temporada, el 7,5%, unos US$ 14 millones, casi duplicándose de un año a otro. Con la operación de Atlantic Blue, y aunque Allende prefiere no hacer proyecciones, sí reconoce que en los próximos años este negocio de la genética se expandirá de una manera mucho más potente. “Ese es el gran cambio, poder abrir esta genética y comercialización. Es un negocio que debiera crecer muy fuerte en los próximos años”, detalla.

Además, con la compra europea ven crecimientos por el área de consumo, sobre todo en Europa del este y el sur de Europa, donde los per cápita son guarismos bajos, 100 a 200 gramos, frente a un kilo de Estados Unidos, por ejemplo.

La operación de Atlantic Blue se cierra el 30 de noviembre. Para financiarla, el pago se estructuró de la siguiente manera: el 10% ya está pagado. Luego, el 30 noviembre vendrán US$ 74 millones, que sumarán el 40% de la transacción al contado, financiado con capital propio y líneas de financiamiento. Y el 60% restante, en cuotas iguales en 10 años, a una tasa de interés que no superará el 4% y que esperan servir con los propios flujos del negocio. Por ello, de una deuda financiera neta como compañía de unos US$ 500 millones, Allende visualiza otros US$ 100 millones, no descartando que si es preciso hagan alguna reestructuración. Si serán bonos o un aumento de capital, lo condiciona a nuevas adquisiciones, “si hacemos inversiones adicionales a esta, lo que es posible. Porque Hortifrut está siempre viendo nuevas oportunidades en distintos mercados. No lo vemos necesario para esta operación”, dice.

La India, un pendiente: “Estamos en eso”
En efecto, la adquisición de Atlantic Blue no es el único frente de crecimiento de la compañía. Es más, Juan Ignacio Allende anticipa que el crecimiento inorgánico seguirá. “Sí, va a continuar. Decir que no sería ir contra el ADN de Hortifrut”, sentencia.

Vecino a España, en Portugal, planean crecer. Allá la compañía ya tiene una incipiente presencia, con una participación no controladora en la firma Bfruit —de la que poseen el 11,84%—, y un campo piloto de 30 hectáreas. Ahora, revela Allende, darán el salto para generar un negocio en que Hortifrut controle. Ya crearon la sociedad Hortifrut Portugal, con miras a lanzarse en la producción en la zona centro sur del país, en la región de Odemira, con la expectativa de sumar 250 hectáreas, campos para frambuesas y moras. La producción debiera ser para la temporada 2022–2023 y Hortifrut espera tener sobre el 70% del capital.

En América, Hortifrut también ha concretado otros deals. “En Ecuador estamos empezando a producir”, explica Allende. Hace unos meses se asociaron con el grupo que lidera el empresario Daniel Hidalgo, un conglomerado presente en las ERNC en hotelería, y también son exportadores de flores. Con ellos constituyeron en partes iguales (50-50%) la sociedad Hortifrut Ecuador, que está por debutar. “Estamos haciendo el levantamiento de las hectáreas que queremos plantar. Ya tenemos el material genético en los campos de flores de nuestros socios, los viveros también, así es que está todo listo para partir”, detalla Allende, en un plan en el que ahora están viendo la superficie con la que partirán con campos propios, con prioridad para arándanos.

Allende precisa que entre los atractivos estuvo la disponibilidad de mano obra, de agua y beneficios tributarios, además de aspectos climáticos.

En Perú, donde la compañía posee incluso más hectáreas que en Chile, con unas 2.200 hectáreas, el plan de la compañía es crecer con terceros, con los licenciamientos. “No es nuestra intención seguir creciendo en Perú, porque a través del licenciamiento podemos seguir creciendo. Ese modelo nos gusta mucho, porque es de menor requerimiento de capital y genera flujos muy interesantes”, dice el CEO, en un mercado en que ya ha habido cambios regulatorios, una reforma en la ley agraria que les impactó los costos y por la que han tomado medidas para acrecentar productividad de los campos.

En Chile, hace unos tres meses y a través de Vitafoods —la sociedad con Alifrut en Chile, para el negocio de congelados—, concretaron otra compra, la de los activos de Framberry, una compañía que estaba vinculada a Cristoph Schiess, en Osorno, y que les permite incrementar su presencia en arándanos, frambuesas y en congelados.

¿Algún otro mercado? En China, la firma ya está llegando a 500 hectáreas este año (allá es arriendo). Respecto del mercado asiático en general, Allende reconoce que India es un pendiente, augurando que en 15 años estará como China en la actualidad. “Estamos en eso”, desliza Allende sobre la prospección de ese mercado.

Y si se trata de proyectos disruptivos y de innovación, en Estados Unidos, Hortifrut trabaja en otra iniciativa, para ensayar y producir berries en contenedores en las ciudades, para lo que establecieron un convenio con AeroFarms, una firma americana basada en New Jersey, que hace 'agricultura vertical'. “Esperaría que dentro de los próximos dos o tres años empezaríamos a tener algunas cosas”, plantea Allende.

Hortifrut también debutó con otra compañía, BerriHouse, para venta online al consumidor, que ya opera en Santiago, Sao Paulo y la próxima semana parte en Guadalajara, para vender directamente.

“La gente nos ve como una exportadora de berries chilena, y hoy se ha transformado en una plataforma global, genética, cliente final”, enfatiza el CEO.

En el último ejercicio, Hortifrut obtuvo utilidades por US$ 54 millones, ebitda por US$ 175 millones y ventas por US$ 689 millones. Allende anhela, para la siguiente temporada 2021-2022 acercarse a vender unos US$ 1.000 millones.

Dato

. En Ecuador, la empresa está comenzando a producir, asociados con el grupo que lidera el empresario local Daniel Hidalgo.

Fuente: https://portal.nexnews.cl

 

Etiquetas: hortifrut