Luego de 23 días, culminamos el recorrido por China y Hong Kong, este viaje organizado por la maestría de Agronegocios de la Universidad ESAN convocó, además de los estudiantes, a un grupo de ejecutivos y empresarios del sector.
Enviado especial: Ángel Manero.
Agraria.pe.- Prácticamente hemos recorrido lo principal de China: las zonas rurales de grandes extensiones agrícolas al norte, las zonas más tropicales al sur donde predomina el minifundio, las áreas de logística interna y los mercados. Hemos observado los grandes contrastes de China, donde hay ciudades muy modernas, pero un sector rural bastante más rezagado; sin embargo existe un elemento que ayuda a que esta brecha se cierre rápidamente: la gran infraestructura que se construye.
Son impresionantes las carreteras y la red de ferrocarriles con que cuenta este país. Las obras de irrigación, entre ellas el gran proyecto de las tres gargantas en el río Yangtse. Este río, que tiene unos 6300 Km. de largo, solía inundar poblados y áreas agrícolas antes de construirse la represa. Ahora además de garantizar el agua a poblaciones que superan los 400 millones de habitantes, tiene una potencia de generación eléctrica de 18 GW (unas veinte veces la capacidad del Mantaro).
Otra mega infraestructura es el nuevo puerto marítimo de Shangai donde se ha construido una isla artificial, para obtener un puerto de aguas profundas, que está unido al continente por un impresionante puente de 32.5 Km. de largo. Este puerto que cuenta con más de 50 grúas pórtico genera su propia electricidad a partir de una serie de generadores eólicos instalados en el mar.
China parece gobernada por un ingeniero civil (el actual presidente Hu Jintao es Ingeniero Hidráulico y el anterior Jiang Zemin es Ingeniero Eléctrico). Es muy interesante analizar cómo construyen nuevas ciudades para generar polos de desarrollo en las zonas rurales, entendiendo que primero es la infraestructura y luego el desarrollo económico.
El agro chino aún es asistido por el gobierno. Las más importantes zonas de producción de granos tienen precios de compra asegurados y subsidiados y las pequeñas áreas agrícolas del sur tienen facilidades de créditos y de transferencia tecnológica, principalmente en semillas y manejo de invernaderos. No obstante, China parece carecer de una clase empresarial agrícola, no hay empresarios importantes en la producción agrícola a diferencia del comercio.
China carece de una apropiada logística de manejo de perecibles y de buenas prácticas de manufactura. La cadena de frío no es bien administrada y el grueso del comercio de frutas y hortalizas se realiza en condiciones similares a la de nuestros mercados mayoristas.
Ha sido muy importante realizar este viaje y aprender mucho sobre la cultura china, de su potencial agrícola y de su potencial cómo comprador para nuestros productos. Puedo concluir que el Perú está en perfectas condiciones para poder aprovechar este mercado, nuestra competitividad productiva y empresarial agroexportadora es mejor que la de ellos. Lo siguiente es ir allá a abrir oficinas comerciales, porque si algo quedó claro es que todos están yendo a China para quedarse.