El incremento del precio de los commodities en los últimos años ha sido impactante. Aunque se espera que el del maíz baje, podría volver a subir. En general, los precios se mantendrían en niveles récord. También lo de la carne vacuna y de cerdo.
Por: Redacción
Lima, 22 de noviembre 2013 (Agraria.pe) “El futuro de la agricultura tiene buen aspecto. En Estados Unidos las utilidades de este sector ascienden a US$112 mil millones y se vienen tres años consecutivos con ganancias records”, indicó Mike Dwyer, del Servicio Exterior Agrario del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), durante su presentación en el seminario “Agrotendencias 2013”, que organiza la Asociación de Acopiadores de Argentina.
Al respecto, indicó que el incremento en el precio de los commodities en los últimos años ha sido impactante y se espera que el precio del maíz baje. No obstante, después volvería a aumentar, como también el trigo, la soja y el arroz, por lo que en los próximos 10 años permanecerán en niveles récord. Lo mismo que la carne vacuna y de cerdo.
En ese sentido, destacó que debido a las altas utilidades del sector agrícola en Estados Unidos, los productores de dicho país están comprando la mejor tecnología que hay en el mundo, lo que permite producir más en menor tierra.
Asimismo, Mike Dwyer detalló los principales 7 factores que tendrán impacto en la agricultura del mundo en la próxima década.
El primer factor es el crecimiento económico global y el surgimiento de la clase media, particularmente en China y el sudeste asiático. Se espera que en los próximos 10 años la clase media en los países en desarrollo se duplique y el impacto en la demanda de la carne será muy importante.
El USDA hizo un análisis que muestra por país cómo reaccionan los consumidores cuando aumentan los ingresos en un dólar. Los de menores ingresos gastan el 60% de ese dólar en más comida. En China, esa cifra es del 40%. En Estados Unidos, del 6%. “La mayor parte de la demanda va a provenir de esos países en que el impacto en los alimentos es mayor”, dijo.
Dwyer destacó el cambio en el consumo de carne. El incremento ha sido del 1% en la Unión Europea, del 2% en Norteamérica, del 16 % en el sudeste de Asia, del 27% en China y un tanto más en Sudamérica. “Esto tiene implicancias en la demanda de alimentos y se traduce en más harinas de soja, cereales, etc.”, dijo.
El segundo factor es el valor del dólar, en ese sentido destacó que cuando baja el dólar, presiona hacia arriba el precio de los commodities, porque se cotizan en esa moneda.
El tercer aspecto es la producción mundial de biocombustibles donde se seguirá utilizando al maíz y al aceite de soja como materia prima.
El cuarto es el papel del comercio y su liberalización, donde señaló que el comercio va a aumentar en los próximos 10 años. “El comercio agrícola global en el 2002 era de 250 mil millones, en el 2010 era de más de 800 mil millones y va a seguir subiendo”, además crecerán las importaciones de los países en desarrollo.
El quinto factor son los precios de la energía, cuyo costo de producción ha aumentado en los últimos 5 años. En ese sentido, expresó que las ONG que se concentran en el medio ambiente no ven que no se podrá producir lo necesario para que el precio de los alimentos sea accesible. ¨Esto no cambiará en los próximos 10 años”, acotó.
Al abordar el sexto factor, el representante del USDA sostuvo que si el mundo necesita más alimentos hay dos alternativas: utilizar más tierra o aumentar los rendimientos. Para Dwyer, en los próximos 10 años se podrán hacer ambos, ya que habrá más tierras disponibles que se concentrarán en Brasil, Ucrania y Rusia.
Asimismo, destacó que la disponibilidad de tierras no cultivadas en América Latina es de 123 millones de hectáreas y en África de 202 millones, pero están muy inaccesibles y sin infraestructura.
El último factor es la biotecnología. Según anunció, nuevos eventos van a liberarse al mercado, los cuales van a bajar los costos y aumentar la producción.
Sin embargo, destacó que un hipotético escenario para que este panorama no se presente en el futuro sería una desaceleración brusca de China o una crisis en Europa. “China es clave: si su crecimiento se detiene, bajarán los precios de los commodities y el escenario será muy distinto”, finalizó.
Dato
- El seminario “Agrotendencias 2013¨ se celebró en Buenos Aires el pasado martes 19 de noviembre.