COLUMNA DE:
Ing. Alfonso Felipe Velásquez

Ing. Alfonso Felipe Velásquez

22 enero 2019 | 09:16 am Por: Ing. Alfonso Felipe Velásquez

Se necesita más impulso promotor para alcanzar el éxito exportador

Se necesita más impulso promotor para alcanzar el éxito exportador
Es indudable que el crecimiento de las agroexportaciones en el 2018 refleja la siempre oportuna gestión de los empresarios exportadores quienes apuestan por la diversificación de mercados, la mejora de la calidad; además es oportuno reconocer el acompañamiento del Gobierno con la apertura de mercados y la actitud ágil del Senasa para establecer los protocolos fitosanitarios.

Sin embargo un hecho de mucha importancia fue el restablecimiento del uno por ciento adicional del drawback (pasó de 3% a 4%). Dicha medida significó brindarle al sector exportador mayor competitividad, lo que permitió colocar los productos en el mercado de manera más fácil. Sin acompañamiento promotor esto no se hubiera logrado.

Esperamos que este crecimiento sea sostenido, pero ello dependerá de mantener el nivel de competitividad. Por esa razón, como empresario exportador celebro el pronunciamiento de los gremios empresariales donde se solicita ahora al presidente de la República avanzar aún más y reestablecer el 5% del drawback.

Sin embargo, no todas fueron buenas noticias, ya que indudablemente las reconocidas falencias que tiene nuestro país en infraestructura (puertos, aeropuertos, carreteras, entre otros) no nos permiten crecer a tasas que deseamos. Además, la ubicación de Perú (situado en el puesto 63) en el Informe de Competitividad Global 2018 elaborado por el World Economic Forum (WEF) se debe a la falta de institucionalidad en el país.

La actual coyuntura política indudablemente impacta terriblemente en las inversiones. Estamos seguros que nuevas áreas que podrían ser sembradas y nuevas inversiones que podrían hacer nuestros empresarios de todo el sector agroindustrial, están siendo detenidas justamente por este clima de alteración que existe en el entorno institucional del país.

Fuera de eso, si tenemos que hablar netamente de cultivos, es importante el crecimiento porcentual de productos como la palta (más de US$ 700 millones), arándanos (más de US$ 590 millones), mango fresco (US$ 223 millones), mango procesado (US$ 75 millones), además del posicionamiento de otros cultivos como banano orgánico, granada, hierbas aromáticas, productos orgánicos, etc.

Además, el clima peruano y nuestra diversidad geográfica permiten a nuestro país incursionar en nuevos cultivos que tienen alta demanda en el mercado mundial como la cereza, frambuesa, piña Golden, nueces, entre otros.

En general hay un potencial inmenso que necesita ser aprovechado y en donde existen oportunidades para los pequeños productores organizados, quienes deben participar más activamente en el valor agregado de sus productos, de esa manera se podrá desarrollar también la industria nacional.

La demanda de nuestros productos tienen que permitir al empresario sentir su compromiso y su responsabilidad por la trazabilidad en toda la cadena de valor, eso significa que debemos trabajar empresarios y sector público unidos -a través de los programas de asistencia técnica y capacitación- en la mejora productiva; al mejorar económicamente esas zonas podamos contribuir al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS). 

Tenemos que alegrarnos de que nuestro trabajo y nuestra introducción a nuevos mercados nos ayuden a reducir la pobreza, disminuir los índices de anemia, a mejorar las condiciones de salubridad, cubrir las necesidades básicas insatisfechas de las zonas productivas donde todavía hay bolsones de pobreza. Que ese crecimiento que brinda la agroexportación realmente pueda contribuir en nuestro país a generar desarrollo social y económico.

Este crecimiento de las agroexportaciones peruanas responde a la mejora de la calidad, el incremento de la demanda de alimentos saludables y por otro lado el crecimiento de las clases medias en los países en desarrollo. Ese fenómeno de mejoramiento económico mundial es algo que permite avizorar un techo amplio para el crecimiento de nuestras producciones. 

El mundo recién está aprendiendo a conocer la presencia peruana, la calidad del Perú  y el potencial de los empresarios peruanos.