(Agraria.pe) Las perspectivas de la economía cafetalera peruana muestran, de no adoptarse una pronta reactivación productiva, un horizonte de incertidumbre y crisis social, que afectaría a más de 3 millones de peruanos residentes en 400 distritos rurales de los valles interandinos de nuestra selva alta.
A la baja productividad en el 75% del parque cafetalero, que supera los 15 años de instalación, se suma el desorden climático, incremento de costos de producción, y pérdida de competitividad en relación a otros países. “Esto se agrava con las duras condiciones que nos plantea la Unión Europea para seguir vendiendo a sus mercados, y la desidia de las autoridades peruanas para la implementación de tales normas”, advirtió el presidente de la Junta Nacional del Café (JNC), Tomás Córdova Marchena.
Dijo que la Misión del Banco Mundial contratada por el Ministerio de Comercio Exterior (Mincetur) para evaluar el nivel de riesgo que presenta nuestro país, frente a las exigencias de la Unión Europea, ha dado, en lenguaje diplomático, un ‘jalón de orejas’ a las autoridades peruanas, por el retraso en la implementación de medidas preventivas que excluyan a Perú como país de alto riesgo.
“Ha reportado escasa coordinación entre ministerios vinculados a la actividad cafetalera y cacaotera, inclusive entre unidades operativas de un mismo ministerio, para abordar los desafíos que plantea la legislación europea. También señala que tal situación se agrava al no escuchar y atender a los gremios de agricultores que tienen voz y propuestas al respecto”, precisó el dirigente de la JNC.
Explicó que uno de los mayores escollos es la legalidad de las fincas de las familias cafetaleras, pues el 60% carecen de títulos de propiedad, y están impedidos de alcanzar este legítimo derecho, debido a la exclusión establecida en la “Ley de forestal y fauna silvestre” (Ley N° 29763), que implica, de alguna manera, la expropiación de la tierra que los campesinos heredaron de sus padres y abuelos, y por cuyo uso o trabajo, deben pagar un canon, o merced conductiva. “Este es un abuso extremo que el Poder Ejecutivo y Congreso deben corregir de urgencia”, demandó el dirigente cafetalero.
Exportaciones de café caerían 25% en volumen este año
En relación a las exportaciones de café en el período enero/agosto de 2023, indicó que apenas suman 72.000 toneladas, y que hasta diciembre se espera llegar a 185.000 toneladas, lo que significaría una caída del 25% en volumen, en comparación a las 246.600 toneladas despachadas en 2022.
Indicó que este menor volumen a despachar debe llamar la atención, en especial a las autoridades de turno, para que escuchen el clamor de los productores, exhortó el dirigente cafetalero.
Remarcó que Perú ha logrado reconocimiento internacional como un país exportador de cafés de calidad, gracias al trabajo de las cooperativas de café que apostaron por la producción de cafés especiales y sostenibles, pero para consolidar y ampliar la oferta, se requiere la implementación de un programa de reconversión de la caficultura peruana. “Esta experiencia y avances, debe ser debidamente valorada por Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), y otros sectores públicos”, expresó Córdova.