(Agraria.pe) La producción de limón fue una de las más afectadas por los fenómenos climáticos del 2023. Esto generó una grave crisis que estancó las exportaciones peruanas del producto y generó una gran escasez en el mercado interno. La válvula de escape al menor volumen disponible fue el ajuste al alza de los precios, especialmente elevada entre agosto y septiembre.
Debido a la naturaleza del cultivo, que no tiene ciclos de crecimiento extremadamente largos como otros productos de la canasta agroexportadora peruana, la normalización de su producción post fenómeno El Niño fue relativamente rápida y ya para inicios del 2024 se han obtenido mejores volúmenes. La principal región exportadora es Piura (55% de participación en las exportaciones peruanas), coincidentemente la más azotada por el último fenómeno El Niño. Detrás se ubican Lambayeque, con 37% de participación, y Lima, con 5%.
Son tres las variedades que actualmente exporta el Perú, siendo la principal la Tahití (86% de participación). Muy por detrás se ubican el Limón Eureka, con 10% de participación, y el Limón Sutil, con apenas 4%.
Uno de los más grandes proveedores mundiales en la actualidad es Brasil, pero debido a factores climatológicos que ha llevado acarreando todo el 2024 en sus regiones productivas, no ha sido capaz de satisfacer la demanda de varios destinos clave, como Europa y Latinoamérica. Y esto se ha presentado como una gran oportunidad para el limón peruano en su proceso de recuperación productiva.
De enero a julio del 2024, los envíos de limón fresco peruano sumaron 32.115 toneladas por un valor de casi US$ 40 millones, lo que significó un crecimiento de +31% en volumen y +56% en valor, en comparación a lo registrado en igual periodo del año anterior. Con respecto al precio, gracias a la escasez en mercados clave, registró un aumento de casi 20%, a pesar de que la oferta peruana creció bastante, llegando a promediar US$ 1.24 por kilogramo.
Para el mes de julio, el grueso de la campaña de limón ya ha sido exportado, por lo que queda menos del 30% del total anual. Por consiguiente, la proyección de Fresh Fruit para el cierre del año es bastante positiva, con una predicción aproximada de 46,000 toneladas para final del año por un valor de US$ 56 millones. De darse estos números, representaría un crecimiento de 32% en volumen y 53% en valor en el acumulado anual.
Dinámica de las exportaciones
El principal destino del limón de origen peruano fue los Estados Unidos. Sin embargo, este mercado no se destacó por sus precios, debido a dos factores. El primero fue la presencia constante del limón mexicano que, a pesar de sus problemas de producción, pudo sostener su abastecimiento y el aumento de los envíos peruanos en más de 50%. Esto produjo que los costes en este destino se redujeran en casi 7%, a diferencia de la mayoría de las otras regiones donde no domina México y se vieron alzas en los precios.
Justamente, en Europa, ante el tropiezo de Brasil y la escasez que esto generó, se revalorizaron los limones de productores como Colombia, Perú y Guatemala. En específico, el Perú pudo aumentar sus despachos en casi 3% en volumen, pero con precios mucho mayores. En promedio, el exportador peruano recibió 13% más por kilogramo exportado de limón hacia Europa. Sin embargo, esta no ha sido la región más aprovechada debido a la dificultad logística de la exportación del limón a destinos relativamente lejanos.
Chile fue quizá el mercado clave de esta campaña. Los precios fueron exorbitantes debido a la ausencia de volúmenes durante algunos meses. Esto produjo que, a pesar de que los volúmenes se redujeron en solo 4%, los precios aumentaron en 117%.
Fuente: Fresh Fruit