(Agraria.pe) La organización profesional española agraria ASAJA Murcia ha calificado como "inaceptable y bochornoso" que se quiera recortar a la mitad el envío de agua del Tajo para los cultivos del Levante español. El hachazo al Trasvase causará la pérdida de 5.000 empleos y 12.000 hectáreas de regadíos.
Según ha explicado Alfonso Gálvez Caravaca, secretario general de ASAJA Murcia, "estamos muy preocupados por el recorte de este trasvase, pues se estima la pérdida de 5.000 empleos, la eliminación de 12.000 hectáreas de cultivo y la merma de € 122 millones al año, según datos aportados por la Confederación Hidrográfica del Segura".
Además, Gálvez Caravaca señaló que "esto es un enorme varapalo para nuestra agricultura que no podemos consentir, ya que se dejarán de enviar 105 hectómetros cúbicos netos de excedentes, mucho más de lo que se había estimado hasta ahora, es un disparate y no estamos dispuestos a consentirlo".
Abandono del agua desalada
En cuanto a la eliminación del 'precio social' del agua desalada por parte del Gobierno central, el titular de ASAJA señala que "es una forma de abandonar la utilización del agua desalada, especialmente en las zonas de costa, y evidentemente, con esta medida no se quiere apostar por el agua desalada, lo que también perjudica a la rentabilidad del campo murciano".
"Este recorte se basa en criterios claramente ideológicos, despreciando estudios rigurosos sobre los actuales caudales ecológicos del río Tajo que son más que suficientes", apunta Gálvez Caravaca.
Además añade: "Este Gobierno de coalición sociocomunista va a poner en grave riesgo la economía agraria del Sureste Español y es incapaz de hacer valer nuestra seguridad alimentaria en un panorama de inestabilidad en el suministro de alimentos a la población española y europea".
Y sentencia comentando que "Pedro Sánchez (el presidente español) castiga una vez más, a nuestro sector agrario con la intención de mermar la capacidad productiva de España en beneficio de nuestros competidores como es el caso de Marruecos y Egipto, con una política exterior claramente perjudicial para España".