Cada vez más se hará patente el gusto del público por concretar sus compras online, incluso los alimentos. Y será ineludible para las marcas trabajar con líneas de productos amigables con el ambiente, nutritivos y sostenibles, factores por los que el nuevo consumidor está dispuesto a pagar más.
(Agraria.pe) La irrupción de la tecnología y el perfil del consumidor millenial, esos son dos factores que están llamados a marcar el derrotero de la venta minorista de alimentos (o retail) a nivel mundial. Ya esta industria está viviendo una gran revolución en Estados Unidos y Europa, y se espera que pronto las tendencias que hoy son de vanguardia se conviertan en norma a nivel global.
Nicholas Thomas, director Desarrollo de Negocios de Gambit Group en EE.UU., apunta como dato revelador que ya existe una versión Premium de Amazon, el gigante de venta minorista por Internet, llamado “Amazon Fresh”, que permite en determinadas regiones del país norteamericano la compra de alimentos cuya entrega se concrete en dos horas como máximo.
“El campo de batalla hoy está en la góndola digital y las entregas de corto plazo. En 2016 era claro que en este campo había dos jugadores claves en el mercado norteamericano: Amazon con 26% de las compras online de alimentos, y Walmart con 16%”, explica. Y agrega que el valor de la inmediatez que facilita la tecnología es tan relevante, que un estudio reciente reveló que un 25% de consumidores en línea desistía de la compra si no encontraba habilitada la opción de entrega inmediata.
No es de extrañar, agrega, que en un mundo hiperconectado la inmediatez sea un valor, así como la información. Por ello, a nadie llama la atención ver al público en los pasillos de los supermercados revisando en sus teléfonos celulares la información disponible sobre los alimentos que van a comprar. Esto será en tanto la gente siga movilizándose físicamente hacia ellos, porque las compras a través de Internet van ganando espacio, si bien aún son pequeñas porcentualmente (hasta 4% aproximadamente) en el total de ventas de los supermercados. Sin embargo, se estima que hacia el 2025 este tipo de transacciones representen del 20 al 30% del total en este negocio.
Ya en Gran Bretaña las ventas en línea en los retailers de alimentos alcanzan el 7% del total, en tanto que en Corea del Sur este índice sube hasta un 20%.
Factor millenial
El otro gran motor de cambio que refería Thomas es el de los millenials, un grupo generacional que en EE.UU. alcanza hoy los 92 millones de individuos, mucho más que los 77 millones de ‘baby boomers’ y 61 millones de la Generación X.
Para el especialista, a este consumidor millenial, nativo digital, la noción tradicional de fidelidad a las marcas está quedando atrás, pues le interesa más que el producto que adquiere sea sano y ecológico. La conciencia de una vida saludable entre este grupo es mayor que en los otros.
“El millenial es el primer consumidor nativo digital, sabe que comer sano es importante, y busca saber lo que el producto hace, personalización de la experiencia. Le importa que sea ecológico, socialmente responsable, renovable, práctico y listo para comer…además, un estudio mostró que entre ellos, un 34% daba mayor credibilidad a una marca cuando tiene activa participación en redes sociales”, desarrolla.
Esta preocupación por conocer más del producto es la arista que Thomas propone como área de oportunidad para los productores peruanos. Y es que el millenial está muy interesado en la historia del alimento que adquiere, por lo que Perú, con sus notables recursos naturales y desarrollo de productos saludable en entornos amigables con el ambiente y de perfiles exóticos, tendría una notable posibilidad de ‘enganchar’ con este público.
“Perú está en una posición mejor que cualquier otro país para contar la historia detrás de sus productos. Eso es lo que alienta las ventajas de un producto para el consumidor, que acepta pagar un costo adicional si sabe que es biodegradable o de alto valor nutritivo y que minimicen los desperdicios”, refiere.