29 abril 2019 | 09:38 am Por: Edwin Ramos | prensa@agraria.pe

Informe del Centro para la Promoción de Importaciones de Países en Desarrollo -CBI

El delicado y creciente mercado de la exportación de papaya a Europa

El delicado y creciente mercado de la exportación de papaya a Europa

No se trata de un fruto tan conocido como el mango y otros tropicales, pero poco a poco va ganando consumidores en el Viejo Continente. Alemania ya es un gran consumidor y Brasil se ha posicionado, por ahora, como el proveedor mejor consolidado.

(Agraria.pe) El consumo de papaya en Europa no es todavía tan común como en los países tropicales, pero está creciendo de manera gradual. El desarrollo de mejores logísticas, presentaciones listas para comer y una mayor promoción ayudan a convertirla en un suplemento de otras frutas tropicales mejor conocidas. 

Un reporte del Centro para la Promoción de Importaciones de Países en Desarrollo – CBI, recomienda a los exportadores de papaya hacia el Viejo Continente cuidar de ofrecer un producto en buenas condiciones, limpio, sin señas de materias extrañas, prácticamente libre de pesticidas que afecten su apariencia general, sin humedad externa anormal (se excluye la que corresponde a la condensación propia del traslado de almacenamiento frío), sin olores o sabores, de textura firme, sin signos de daño por altas o bajas temperaturas y con tallo que no exceda 1 centímetro de longitud.

Se reconoce que la papaya es compleja de manejar debido a su relativamente corta vida y delicadeza, ya que el fruto se hace moretones fácilmente. Su temperatura de almacenaje debe mantenerse a 10 grados Celsius para prevenir una sobremaduración debida al calor y decaimiento por temperaturas frías. 

Asimismo, se recomienda usar el empaquetamiento característico que consiste en cajas de cartón con separaciones individuales de tal manera que se eviten los moretones y otros daños. También se debe cuidar que las señas o marcas empresariales no contengan tinta tóxica o goma. 

Mercado en crecimiento
El CBI apunta que luego de varios años en que la importación europea de papayas se mantuvo en 30 mil toneladas, el rango creció hacia las 40 mil toneladas en 2015 y 2016. Ya en 2017 el volumen alcanzó las 43 mil toneladas por un valor total de 103 millones de euros. “Esto indica que cada vez más consumidores se están familiarizando con las papayas. Prácticamente todas las importaciones de papaya que llegan a Europa son de países en desarrollo. Esto incrementa las oportunidades de exportación para el mercado europeo”, detalla. 

En este ámbito, la entidad explica que Alemania y Países Bajos son los principales importadores de papayas frescas, y son también quienes muestran los niveles de crecimiento mayor. Una buena parte de las importaciones alemanas se hacen a través de Países Bajos (70% de la papaya que ingresa a este país se re-exporta), lo que explica los altos índices de ambos países. También Portugal y España importan grandes cantidades, en el primer caso se debe a sus lazos históricos con Brasil, el mayor exportador de papayas.

En cambio, en los países de Europa del Este los volúmenes son todavía bajos. Polonia y República Checa han incrementado sus importaciones a varios cientos de toneladas anuales, volúmenes comparables con los de los países escandinavos. Si el volumen crece en Europa Occidental, se puede esperar que el Este incremente su demanda también. 

“Como exportador, se pueden encontrar socios que importen en Países Bajos, o enfocarse en el comercio directo con países de destino relevantes”, recomienda el CBI.

Para tentar con éxito la exportación de papayas al continente europeo, la institución de promoción comercial recomienda buscar las variedades y mejoras técnicas que permitan facilitar el transporte del delicado fruto. Un buen ejemplo es la papaya ‘Original’ de Brasil, que tiene una vida en estante más larga y mayor resistencia a las enfermedades. Incrementar la experiencia en la maduración de papayas en destino también ayudará a estimular la demanda para las presentaciones listas para comer.

Destaca también la importancia de la innovación, como fue en el caso de la papaya sin semilla que se presentó en la edición 2015 de Fruit Logistica y fue galardonada.

Las principales variedades en el mercado europeo actualmente son la Solo Sunrise y Golden para tamaños pequeños de hasta 700 gramos, y la Formosa para las que superan el kilo. El consumo suele enfocarse en las más pequeñas, especialmente en el noroeste europeo pues prefieren el consumo individual. 

El panorama es favorable gracias a que los consumidores cuidan cada vez más sus dietas y la papaya es conocida por ser nutritiva y ayudar a la digestión. Resaltar estos beneficios en la promoción del producto puede ayudar a incrementar el consumo. 

También hay oportunidad en el nicho de papayas orgánicas, a pesar de ser un segmento bastante pequeño por su calidad exótica de baja escala debido a que la provisión actual es insuficiente. 

Principales exportadores
Brasil es el mayor exportador de papayas frescas hacia el continente europeo, de hecho en 2017 colocó en dicho mercado 40 mil toneladas del fruto por un valor de 87 millones de euros. Tailandia y Ecuador fueron los segundos más importantes proveedores con valores de 4 millones de euros. Participan también, aunque con pequeñas cantidades, Ghana, Jamaica, Costa Rica y México, que varían de pocos cientos a mil toneladas. 

La producción global de papaya se estima en 12 millones de toneladas anuales. 

Etiquetas: exportaciones , papaya