La Comisión Europea propone un planteamiento más claro para simplificar el ordenamiento jurídico alimentario y fortalecer las normas comunitarias que se aplican a la cadena agroalimentaria para evitar fraudes.
Por: Redacción
Lima, 14 de mayo 2013 (Agraria.pe) La Unión Europea busca reforzar su normativa de seguridad alimentaria, para lo que simplificaría el ordenamiento jurídico alimentario, informó el portal especializado en alimentos y bebidas Club Darwin.
Con esa meta, la Comisión Europea (CE) impulsaría un cambio legislativo, que también fortalecería las normas comunitarias que se aplican a la cadena agroalimentaria para evitar fraudes.
Esperan que contribuya asimismo a reducir la burocracia de los procesos y procedimientos que debe afrontar la industria alimentaria, desde el sector primario hasta la distribución alimentaria, con especial consideración para las micro, pequeñas y medianas empresas.
La renovada normativa regiría a partir de 2016 y estaría enfocada en cuatro ejes principales:
• Controles oficiales: se plantaría un incremento de los controles con especial foco en evitar fraudes. Las microempresas quedarán exentas del pago de tasas para que su competitividad no se vea afectada, pero no de los controles. Se pedirá a los Estados miembros que integren plenamente controles antifraude en sus planes nacionales de control y que establezcan sanciones económicas disuasorias para casos de incumplimiento.
• Sanidad animal: se propondrán 6 grandes paquetes de trabajo orientados a mejorar las normas, diseñar un sistema común para detectar y controlar mejor las enfermedades y abordar de forma rápida y coordinada los riesgos de seguridad para la salud, los alimentos y los piensos. Se daría suficiente flexibilidad para ajustar las medidas de sanidad animal a los distintos tamaños y tipos de establecimientos y a las diferentes circunstancias locales. El principio en el que se basaría este eje es el de “más vale prevenir que curar”.
• Fitosanidad: La UE propondría reforzar el régimen fitosanitario existente con el fin de evitar nuevas plagas a los cultivadores comunitarios, sin olvidar al sector forestal. Asimismo, se prestaría más atención al comercio de alta riesgo procedente de terceros países y a la mayor trazabilidad de los materiales de plantación en el mercado interior.
• Materiales de reproducción vegetal (incluidas las semillas): La CE establecería reglas más sencillas y flexibles para la comercialización de semillas y demás materiales de reproducción vegetal, para mantener la productividad, la adaptabilidad y la diversidad de los cultivos y los bosques de Europa y facilitar su comercio. Cabe destacar que el 60% del volumen mundial de exportación de semillas procede de la U.E.