Con esta intervención se evita el posible ingreso del virus de la fiebre aftosa, enfermedad que ha sido erradicada del Perú y cuenta con el reconocimiento de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).
Por: Redacción
Lima, 4 de noviembre 2013 (Agraria.pe) Inspectores del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), pertenecientes al Puesto de Control de Ojherani, ubicado a siete kilómetros de la ciudad de Puno, intervinieron el camión de placa de rodaje B4E 380, procedente de Bolivia, que transportaba 48 carcasas de 70 a 80 kilogramos cada una, lo que hace un total aproximado de más de 3000 kilos.
La vigilancia realizada por el Senasa en los puestos de control, en zonas de frontera, evita el ingreso de plagas y enfermedades que puedan afectar a nuestros cultivos y/o crianzas perjudicando a la agricultura, ganadería y a los productores nacionales. Con esta intervención se evita el posible ingreso del virus de la fiebre aftosa, enfermedad que ha sido erradicada del Perú y cuenta con el reconocimiento de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).
Las mercancías pecuarias para que ingresen a nuestro país requieren de un permiso zoosanitario de importación así como el certificado de exportación del país de origen cumpliendo los requisitos exigidos por el servicio oficial del Perú. Además, toda mercancía pecuaria para el tránsito por Perú requiere del Certificado Sanitario de Transito Interno otorgado por el Senasa.
Las infracciones por movilizar productos y subproductos o todo aquel material que pueda vehiculizar el virus de Fiebre Aftosa con destino a zonas libres, sin haber sido sometidos a algún tratamiento que inactive el virus de la Fiebre Aftosa antes del ingreso; y sin contar adicionalmente con la autorización expresa del Senasa, son sancionadas y multadas de acuerdo a las normas sanitarias vigentes.
El transportista intervenido llevaba la carne sin los requerimientos mínimos de higiene y no contaba con los documentos necesarios para el internamiento legal de las carcasas de cerdo, las que presentaban sellos pertenecientes al país del altiplano, por estos aspectos se determina como mercancía ilegal y al no contar con la documentación correspondiente es procedente el decomiso por los inspectores del Senasa.
De acuerdo a lo manifestado por el transportista la carne estaba destinada para ser comercializada en la región Cusco, aprovechando las festividades del 1 de noviembre donde se consume en diversos platos típicos la carne de cerdo.
Para el decomiso respectivo, el Senasa contó con el apoyo de la Policía Nacional del Perú y de la Fiscal Adjunta Provincial de la Segunda Fiscalía de Prevención del Delito, quienes levantaron el acta respectiva y procedieron a la destrucción de las carcasas decomisadas.
Se debe tener en cuenta que la adquisición de carnes de dudosa procedencia significa un riesgo para la salud pública y su comercialización no es permitida por las autoridades municipales encargadas del control del comercio en mercados y centros de abastos.
