(Agraria.pe) El Perú es reconocido mundialmente por su mega diversidad, no solo por la papa, quinua, kiwicha, maíz amiláceo, tarwi y otros cultivos, sino también por su diversidad de frutales exóticos como el maracuya y la granadilla.
Así lo señaló el jefe del Instituto Nacional de Innovavión Agraria (INIA), Jorge Ganoza Roncal, durante la inauguración del II Congreso Internacional de Pasifloras del Perú, evento organizado por la Asociación de Exportadores (ADEX) y que continúa hasta hoy en el auditorio de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM).
Destacó que el maracuyá es un cultivo que se siembra mayormente en la costa peruana, desde Tumbes hasta Lima, pero dada su demanda en el mercado no solo nacional sino también internacional, esta fruta también se viene instalando en la selva
Indicó que el maracuyá se comercializa principalmente en Países Bajos, Estados Unidos, Puerto Rico, Chile, entre otros; con una demanda creciente. Además, dijo que esta fruta no solo se utiliza en la industria alimentaria sino también en la industria cosmética y en la preparación de cócteles que son muy apreciados por el público nacional y los extranjeros que nos visitan.
El presidente de ADEX señaló que los efectos del cambio climático vienen propiciando problemas fitosanitarios que afectan la calidad y el rendimiento de esta fruta, por eso es necesario contar con semillas certificadas y viveros que garanticen plántulas libres de enfermedades.
“Por esta razón, el INIA en alianza estratégica con ADEX, realizan una serie de actividades, entre ellas la inseminación con material genético de maracuyá para obtener semillas de mejor calidad, con uniformidad de tamaño en la producción del fruto, mayor grado brix y sobretodo resistentes a plagas y tolerante a los efectos del cambio climático”, manifestó.
Agregó que el INIA con ADEX han conformado la Mesa de Frutas para la Industria, con el objetivo primordial de brindar soporte al proyecto de innovación que se viene desarrollando. Este proyecto se viene ejecutando con el propósito de transferir a los productores tecnologías en el manejo agronómico y fitosanitario del cultivo.
Indicó que a la fecha se ha podido recolectar material genético de maracuyá criollo, los cuales vienen siendo instalados en parcelas demostrativas para evaluar su comportamiento en las diferentes zonas productoras, las que servirán para la propagación de injertos para obtener una semilla con características estables y deseables para la industria alimenticia y cosmética.
Existen más de 8.000 familias dedicadas al cultivo de pasifloras en Perú
Por su parte, el presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Julio Pérez Alván, destacó que en los últimos años Perú se ha posicionado como uno de los principales exportadores de sub productos elaborados con maracuyá, siendo el resultado de la dedicación, inversión y largo trabajo de los productores.
Indicó que hace 15 años, la granadilla y maracuyá eran frutas conocidas pero no tan resaltantes en el escenario internacional como lo son hoy. “El cultivo de pasifloras son una fuente de ingreso muy importantes para numerosas familias peruanas”
En ese sentido, detalló que las pasifloras reúnen a más de 8.000 familias productoras peruanas (instaladas principalmente en Lambayeque, Lima y Áncash) y a más de 50 empresas exportadoras que han hecho posible que actualmente nuestro país se posicione como uno de los principales países exportadores de jugo de maracuyá.
Mencionó que en 2023, las exportaciones de maracuyá (en sus diversas presentaciones) alcanzaron los US$ 66.932.000, mostrando un aumento de casi 11% frente a los US$ 60.473.000 reportados el año previo.
Sin embargo, dijo que en los primeros cinco meses del presente año (enero-mayo) los despachos de esta fruta registraron una caída de -9.8% frente a lo reportado en igual periodo del 2023 y se espera que al cierre de 2024, los despachos caigan en valor -6%. Explicó que esta contracción se debería a diversos factores como la disminución de la producción por los fenómenos climáticos, así como la presencia de nuevas plagas y enfermedades.
En el caso de la granadilla, señaló que se siembra en Lima, Ica, La Libertad, Junín y Cajamarca. Este Cultivo beneficia a los agricultores y la economía local, enriqueciendo nuestra gastronomía.
En el caso de la granadilla, dijo que en 2023, los despachos sumaron US$ 675.000, registrando una reducción de -0.4% respecto a 2022, Para este año se espera un alza de 47, ya que de enero a mayo, los envíos alcanzaron los US$ 628.000,registrando un aumento de 121.8%, esto gracias a las exportaciones de granadillas frescas que llega a 20 mercados y se siguen logrando más accesos como el caso de Argentina el año pasado.
En otro momento, Pérez Alván, destacó que la Mesa de Frutas para la Industria (iniciativa de ADEX y el INIA) junto con empresas (Quicornac, Selva Industrial, Agromar Industrial, Pacific Fruit, Frutos Tongorrape y Agroindustrias AIB), vienen trabajando en la producción de 60 mil plantines de ecotipos sobresalientes de maracuyá, que darán frutos con altos grados brix, buen color, entre otras caracteristicas.
“Se espera que en 2 años se pueda obtener una variedad comercial de maracuyá, la cual podrá ser recogida por todos los agricultores con el objetivo que mejoren su productividad y el maracuyá peruano pueda ser diferenciado por su buena calidad”, finalizó el presidente de ADEX.