Ya hay 17 mil. Lo haría en el marco del Programa Nacional de Innovación Agraria, cuyo presupuesto asciende a US$180 millones y acaba de ser aprobado por el Ejecutivo. El programa también priorizará la investigación de frutos nativos, plantas medicinales y productoras de aceites y semillas de cultivos de importancia nacional. Además promete ¨modernizar¨ la ganadería.
Por: Ani Lu Torres
Lima, 10 de octubre de 2013 (Agraria.pe) El Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) indicó que hasta 2018 el recién aprobado “Programa Nacional de innovación Agraria” ampliará la colección del Banco de Germoplasma, priorizará el desarrollo de recursos genéticos y fortalecerá tres líneas ganaderas.
Así lo señaló Benjamín Quijandría, gerente administrador del Programa Nacional de Innovación Agraria, quien anunció que la ejecución del proyecto empezaría recién durante el primer trimestre del próximo año.
En ese sentido, comunicó que el INIA trabajará “fuertemente” en el desarrollo de recursos genéticos, como también en la identificación de nuevas especies nativas y en recursos biotecnológicos industriales, con el objetivo de identificar la diversidad de las semillas.
“Tenemos 17 mil introducciones de especies en el Banco de Germoplasma de INIA. La meta es tener por lo menos 20 mil especies más (hasta 2018). Pero esa colección debe contar con caracterización genética, bioquímica e industrial para saber cómo y cuándo comercializarlos. La idea es duplicar los recursos que ya han sido analizados e introducirlos a un programa de comercialización”, indicó.
Según añadió, se priorizará crear bancos de germoplasma de frutos nativos, plantas productoras de aceite, productos naturales e infusiones. Los resultados preliminares de este trabajo estarían listos a finales de 2016, anunció.
Respecto al desarrollo de recursos biotecnológicos, indicó que se busca fortalecer y conservar las colecciones de semillas pero también conocer su composición genética y características nutricionales e industriales. “La idea es priorizar la investigación en semillas y cultivos de importancia de seguridad nacional como el maíz, la papa, la quinua y el café”, sostuvo.
“En este campo va a trabajar por un lado el INIA, que tiene fondos de investigación en conjunto con empresas privadas y universidades, y, por otro, se va a buscar alianzas con gobiernos regionales que tengan recursos del Canon Minero para invertirlos en tecnología e investigación agropecuaria. El dinero se destinará para potencializar los 5 productos de importancia nacional y otros productos de importancia para cada departamento”, explicó.
“La modernización de la agricultura significa que se deje de importar tecnología y semillas de otros países, porque algún día llegarán a su tope o no se encontrarán maquinarias para ciertos productos que sólo el Perú produce. Por eso el país debe contar con investigación y desarrollo tecnológico propio”, resaltó y agregó que se busca complementar la investigación con la transferencia de conocimientos. “Buscamos que al menos el 35% de los agricultores del país conozcan de buenos manejos agronómicos”, indicó, subrayando que en la actualidad sólo el 15% de los productores cuenta con esta capacidad.
Cabe recordar que dicho programa fue aprobado el lunes último por el Ejecutivo y cuenta con un presupuesto reembolsable de US$180 millones que será financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco Mundial y su contraparte nacional.
Ganadería
El Programa Nacional de Innovación Agraria no sólo contempla “modernizar” agricultura, sino también la ganadería. Ante ello, Quijandría expuso que el proyecto se concentrará en la investigación de cuyes, alpacas y vacas reproductoras.
“No sólo nos enfocaremos en mejorar la genética de ganadería lechera y de carne. También haremos un intenso trabajo en alpacas de la línea de color, de las que hasta el momento el INIA cuenta con 12 especies. Pero también mejoraremos la calidad de los cuyes. Estamos trabajando en la genética del músculo. Lo que buscamos es hacer crecer y desarrollar la masa muscular para que en sólo 5 meses pueda venderse”, apuntó.
Para el caso de alpacas, el proyecto se ejecutará en los departamentos de Puno, Cusco, Junín, Pasco y Huancavelica y, en el caso de cuyes, en Loreto, Madre de Dios, entre otros.
Personal especializado
Otra meta principal que tiene dicho programa es fortalecer la competitividad del sector agropecuario y eliminar las “brechas tecnológicas”, según indicó Quijandría. Para ello, declaró que se ha planteado trabajar en dos líneas de acción. Una se ejecutaría en zonas agroexportadoras, como Piura, Tumbes, Lambayeque y La Libertad; y la otra, en zonas de agricultura familiar o andina, como en Cusco, Puno, Junín, San Martín, Cajamarca y Abancay, principalmente.
“Lo que buscamos es producir con costos bajos y con alta eficiencia. Por ello, de los US$180 millones, US$110 millones serán para fortalecer el Sistema Nacional de Innovación Agraria y el saldo se destinará a fortalecer directamente al INIA”, dijo y agregó que la institución buscará eliminar ciertas brechas tecnológicas. “Hemos analizado para cada producto una meta diferente hacia la que debemos apuntar. Por ejemplo, en el caso del maíz, nos gustaría alcanzar a la producción de Chile; en café, a Colombia; en arroz, a Uruguay”, ilustró.
Ante ello, el gerente sostuvo que se contratará a personal especializado. “El proyecto traerá 24 especialistas entre peruanos y extranjeros que trabajarán hasta por dos años en la ejecución del proyecto. Pero además, el INIA contratará a 40 jóvenes con maestría para continuar con el programa pasado el 2018”, indicó y mencionó que el pago de los especialistas se agregará al presupuesto del INIA en 2018. “Actualmente el INIA cuenta con 5 doctorados trabajando en el plan. Con esa cifra sólo le ganamos a Bolivia”, remató.
