(Agraria.pe) La Unión Europea (UE) busca facilitar los procesos que permitan el uso de productos biológicos en los cultivos donde se produce alimentación para sus 450 millones de habitantes.
Por ello, en el contexto de su programa conocido como “De la Granja al Tenedor” (o “Farm to Fork”, como se ha popularizado en inglés), los estados miembros aprobaron nuevas normas para facilitar la aprobación de microorganismos para su uso como sustancias activas en productos fitosanitarios. Con ello, los agricultores europeos tendrán nuevas opciones para sustituir sus pesticidas químicos hacia nuevas soluciones consistentes “con sistemas alimentarios sostenibles”, de acuerdo a la autoridad continental.
A fines de febrero, la comisionada de Salud y Seguridad Alimentaria del bloque, Stella Kyriakides, dijo: “Hoy, traemos buenas noticias a los agricultores europeos para ayudarlos a dejar el uso de pesticidas químicos. Los productos biológicos pueden proteger sus cultivos con menos riesgo para la salud humana o el medio ambiente. Los sistemas alimentarios son impulsores clave del cambio climático y la degradación ambiental, y debemos llevar a cabo esta transición con urgencia”.
Agregó que bajo la Estrategia Farm to Fork, hay un compromiso de reducir en un 50% el uso de pesticidas químicos para 2030, para lo cual se deben brindar alternativas que respeten el planeta y la salud. “La UE tiene uno de los requisitos ambientales más altos y un papel de liderazgo en lo que respecta a la sostenibilidad de su sistema alimentario; el anuncio de hoy es una prueba más tangible y concreta de esto”.
Una vez que se apliquen las nuevas normas, previsto para noviembre, la aprobación de microorganismos y la autorización de productos fitosanitarios biológicos que los contengan serán significativamente más rápidos, acelerando su proceso de comercialización.
Las nuevas normas pondrán, en particular, las propiedades biológicas y ecológicas de cada microorganismo en el centro de la evaluación científica de riesgos, que debe demostrar la seguridad antes de que los microorganismos puedan aprobarse como sustancias activas en los productos fitosanitarios.
Fuente: Redagrícola