(Agraria.pe) De acuerdo con el informe de perspectivas de la Asociación Internacional de Fabricantes de Fertilizantes (IFA) para 2023-2027, la oferta global de este producto en 2022 se comportó mejor de lo previsto en un principio, pese a los desafíos que supusieron las sanciones tras el inicio de la guerra en Ucrania, los costes de las materias primas y las restricciones a la exportación.
Según señala IFA, influyó de forma positiva que los gobiernos clarificaran que las exportaciones rusas de fertilizantes no eran objeto de sanción y que, junto a la industria y otras organizaciones, apoyaran las cadenas de suministro.
Rusia reorientó su comercio a países menos preocupados por el riesgo de sanciones, como Brasil y la India; y utilizó sus puertos del mar Báltico, si bien sufrió el bloqueo del tránsito de amoniaco por una tubería que atraviesa Ucrania.
Sólo la producción global de cloruro potásico se redujo en 2022 un 15% anual, con 62.1 millones de toneladas, frente a los máximos de los dos años previos; mientras que la de amoniaco bajó el 1% (182.2 millones de toneladas) y la de ácido fosfórico se incrementó el 2% (84.8 millones de toneladas).
Precios máximos en 2022
La asociación destaca que el reajuste en los mercados energéticos y la menor dependencia del suministro ruso han terminado disminuyendo los precios de los fertilizantes frente a sus niveles récord del segundo trimestre de 2022.
Los agricultores han tenido así un mejor acceso a estos productos, aunque todavía muchos de ellos han debido retrasar la aplicación de fertilizantes o dejar de hacerlo por las limitaciones que seguía del año pasado.
Además del impacto de la inflación, la incertidumbre continúa rodeando la cadena de suministro, en especial por la evolución de los precios de la energía en la segunda mitad de 2023 y por las exportaciones de potasio de Bielorrusia.
Estas últimas sí están sujetas a sanciones directas y tienen problemas para pasar al Báltico por el territorio de la Unión Europea, por lo que han virado más hacia el este.
Previsiones futuras
Según un informe de la patronal de fabricantes Fertilizers Europe, el consumo de nutrientes sumó 14.3 millones de toneladas en 2022 en la Unión Europea.
La patronal estima que el consumo mundial de fertilizantes crecerá un +4 % en 2023, hasta los 192.5 millones de toneladas, por encima de los niveles de 2019, en medio de las previsiones de una mayor superficie cultivada de cereales y del empuje del sur de Asia y Latinoamérica.
A largo plazo, habrá que ver, no obstante, el impacto del cambio climático y la disponibilidad de agua, la situación geopolítica, las distintas regulaciones, el apoyo a la agricultura, las nuevas tecnologías y los cambios en las prácticas agrícolas.
Fuente: Fresh Plaza