(Agraria.pe) La gran mayoría del chocolate que comemos llega a nuestras manos gracias al trabajo infantil. Así se desprende de un nuevo informe patrocinado por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos, que denuncia que las empresas de chocolate mundiales utilizan el cacao de plantaciones en las que trabajan más de un millón de niños de África occidental.
El informe pone de relieve el suspenso de las empresas líderes de chocolate para cumplir sus promesas de erradicar las prácticas poco éticas en sus cadenas de producción. Y es que, durante el Congreso de 2001, algunas de las multinacionales productoras de chocolate más grandes del mundo, como Nestlé, Hershey y Mars, se comprometieron a erradicar "las peores formas de trabajo infantil" de sus fuentes en África Occidental, de donde proviene la mayoría del cacao que utilizan. Pero a pesar de las promesas, las empresas no han cumplido con los plazos para eliminar el trabajo infantil en 2005, 2008 ni 2010. Es más, según el informe, el trabajo infantil en las plantaciones de cacao de África occidental ha aumentado.
De acuerdo al Washington Post, ninguna de las grandes empresas de chocolate del mundo puede garantizar que en su producción no haya trabajo infantil, ya que tan siquiera son capaces de identificar las fincas de donde proviene el cacao que les envían, por lo que saber si en esas fincas hay niños trabajando es imposible.
Según la encuesta del Departamento de Trabajo realizada por NORC en la Universidad de Chicago, hay casi 1.6 millones de niños que trabajan en la producción de cacao. Y lo que es peor, la gran mayoría se encarga de tareas peligrosas como utilizar machetes o cargar grandes pesos. "Como muestra este informe, hoy en día todavía hay demasiados niños en el cultivo del cacao que realizan trabajos para los que son demasiado pequeños o trabajos que los ponen en peligro", explicó Richard Scobey, el presidente de la World Cocoa Foundation, un grupo que representa a las empresas que manejan alrededor del 80% de la producción de cacao mundial.
Según Scobey, el problema no está en la industria sino en que los objetivos de reducción del trabajo infantil fueron demasiado ambiciosos. Los objetivos "se establecieron sin comprender completamente la complejidad y la escala de un desafío fuertemente asociado con la pobreza en las zonas rurales de África", dijo. "Las empresas por sí solas no pueden resolver el problema".
Terrence Collingsworth, uno de los abogados que lleva una denuncia contra Nestlé, explicó al Washington Post que el problema del trabajo infantil, ya sea forzado o no, es que en 2001 las empresas se comprometieron a reducir el trabajo infantil pero no había sanciones si no lo hacían. “Estas graves violaciones de derechos humanos requieren normas obligatorias con graves sanciones, no promesas vacías de las empresas cacaoteras que se benefician de la explotación de los niños”, explica.
Por su parte, Nestlé explicó en un comunicado que "todos los involucrados están de acuerdo en que Nestlé nunca participó en el atroz trabajo infantil alegado en esta demanda. Esta demanda no promueve el objetivo compartido de poner fin al trabajo infantil en la industria del cacao porque no aborda las causas fundamentales del problema y no mejorará las condiciones en África Occidental".
Las compañías de chocolate dicen que han establecido programas para tratar de monitorear las granjas en busca de trabajo infantil y que intentarán expandir estos programas. Jeff Beckman, portavoz de la multinacional Hershey, explicó que en otro estudio de NORC se muestra que donde la empresa tiene programas de reducción del trabajo infantil, este se ha reducido en un tercio, "lo que demuestra que estos programas están teniendo un impacto positivo y enfatiza la necesidad de ampliar aún más estos programas".
Sin embargo, el nuevo informe es claro y muestra que, lejos de reducirse, el trabajo infantil en la producción del cacao en Costa de Marfil y Ghana -los dos principales proveedores de cacao- aumentó del 31% al 49% entre 2008 y 2019.
Fuente: Catalunya Press