La labor del INIA es fundamental para lograr una estabilidad en el tema de la seguridad alimentaria. Las nuevas variedades (de arroz, de trigo, de cebada, de papa) contribuyen a un mejor desarrollo de los cultivos.
(Agraria.pe) Perú tiene suficientes tierras para alimentar a toda su población, siempre y cuando estas se usaran con la más alta tecnología, afirmó el ing. Alberto Maurer, jefe investigador del Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA), durante una entrevista que abordó el tema de seguridad alimentaria y el problema de escasez de alimentos que atraviesa el mundo.
Indicó que la labor del INIA es fundamental para lograr una estabilidad en este tema de la seguridad alimentaria, puesto que las nuevas variedades (de arroz, de trigo, de cebada, de papa) contribuyen a un mejor desarrollo de los cultivos, más eficiente. “La importancia de que todo el paquete tecnológico esté en la semilla radica en que el agricultor no necesita hacer muchos más cambios, sino adquirir esa semilla mejorada que tiene una genética avanzada”, añadió.
En ese sentido, explicó que una vez desarrollada una nueva tecnología, el trabajo del INIA consiste en coordinar con los científicos a nivel nacional, con los gobiernos regionales, que por ley son los encargados de hacer extensión agraria y entregarles a los hombres del campo los beneficios de la nueva tecnología; y con los agricultores, para que estos últimos sean provistos permanentemente de semillas de calidad, de conocimientos y de técnicas, que les permita mejorar de manera significativa su producción.
“En el caso del arroz, que es el cultivo de mayor desarrollo técnico y científico en el país, vendemos la semilla de calidad y lo hacemos a través de productores de semillas privados que trabajan en coordinación con nosotros. Existen empresas privadas y el mercado ha llegado a un rango de precios razonable para el agricultor. Nosotros vendemos las semillas a los semilleristas, ellos las producen bajo el control, supervisión y certificación del INIA, y luego ellos venden a su vez la semilla a los agricultores”, detalló.
De otro lado, Maurer comentó que el INIA, que pertenece al Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), está implementando cambios internamente y sostuvo que el Ejecutivo ha agenciado un crédito de US$ 180 millones del Banco Mundial para ser gastados en 5 años con unas normas y reglamentos muy estrictos ara que el INIA llegue al siglo XXI.
