Fondo se destinará a proyectos de innovación y ampliación de la frontera acuícola en las tres regiones naturales del país. Se impulsa el aprovechamiento de nuevas especies como la chita y beneficios tributarios para dinamizar el mercado interno.
(Agraria.pe) Diversas son las cifras e ideas que ha dejado en el ambiente el VI Foro del Exportador Acuícola y Pesquero. Entre ellas, destaca la proyección que hiciera Héctor Soldi, viceministro de Pesca y Acuicultura del Ministerio de la Producción (Produce), en el sentido de que la producción del sector podría llegar a las 100.000 toneladas este año.
El funcionario señaló que las perspectivas son buenas porque se está gestionando un préstamo del Banco Mundial por S/ 120 millones para financiar proyectos de innovación en pesca y acuicultura, lo que ayudará a ampliar la frontera acuícola (costa y sierra continental, así como la Amazonía) y promover la inversión.
Agregó que si bien la concha de abanico experimenta problemas en su cultivo por el calentamiento del mar, se prevé un aumento en los volúmenes de langostinos y demás especies como la trucha y peces amazónicos, lo que impulsará la producción.
Nuevas oportunidades y medidas tributarias
En cuanto a las nuevas oportunidades que ofrece el sector, Héctor Soldi sostuvo que muchas industrias están invirtiendo en especies que no son las conocidas, lo que amplía el portafolio de productos. “El Instituto del Mar ha promovido el cultivo de la chita, que es una especie de gran valor económico, y hay empresas que ya están recibiendo ovas para producir chita, que puede producir igual que el lenguado, con lo que en el futuro se tendrá una acuicultura mucho más importante para el consumo humano directo”.
Justamente en el plano del consumo, el viceministro resaltó que se están buscando fórmulas para impulsar el mercado interno desde la Mesa Acuícola, que reúne a las autoridades con los productores del sector.
“Hay muchos problemas relacionados con el IGV que los están afectando y estamos en conversaciones con el MEF para apoyarlos en ese campo… El planteamiento es que un langostinero que exporta puede recuperar el IGV, pero si es para mercado interno no lo recupera. La idea es buscar un mecanismo para que ellos también puedan fomentar el consumo interno”, finalizó.
