Empresas alistan inversiones por unos US$ 1.000 millones en los próximos cinco años, como parte de la reconversión de la industria.
(Agraria.pe) En la zona del norte chico, que agrupa a varias empresas avícolas, -entre ellas San Fernando, Redondos, Santa Helena, entre otras- que congrega el 47% de la producción avícola en el Perú, será el punto de partida para la reconversión de la industria avícola, así lo comenta el presidente de la Asociación Peruana de Avicultura (APA), Apolonio Suárez.
“Este es el inicio del proceso de implementación de la industria que será de largo plazo, y para ello estamos firmando el convenio con el Ministerio de Agricultura y Senasa, para trabajar la parte sanitaria y de protocolos”, enfatizó.
Este es el primer paso para la exportación de la carne fresca de pollo a Estados Unidos, que Apolonio Suarez estima demorará alrededor de cuatro años, mientras tanto consideran que habrá todo un proceso de “la reconversión de la industria”.
“En los próximos cinco años se invertirá alrededor de US$ 1,000 millones entre todas las empresas, este año se estima que será de US$ 100 millones. Es una era digital de mejoras en los procesos internos de las empresas”, indicó.
Hacia los mercados de abastos
La reconversión de la industria no solo apunta al mercado internacional, sino a atender al mercado interno de una manera distinta, sostiene el representante gremial, debido a que más de 90% de la producción tiene como destino final los hogares peruanos.
“Un reto para las empresas es el mercado de abastos”, sostiene el representante gremial, ya que éste representa el 80% de la cadena de comercialización, y el 20% restante son los autoservicios.
En Chincha van a trabajar con unas 30 ‘peladurías’, lo que son los centros de beneficios ubicados en los mercados de abastos y que -según explica Suárez- ya han sido consideradas por Senasa como parte de la cadena de comercialización.
Antes, las peladurías de los mercados de abastos no eran parte del proceso, hoy sí, y es que esto forma parte de lo que el consumidor busca.
“Por más de 30 años hemos luchado con el consumidor, pero el ama de casa quiere esa atención personalizada que le ofrece el mercado, de obtener un pollo fresco”, enfatizó.
El mercado de abastos es un fenómeno, pues ha pasado de 1,100 establecimientos en el año 1990 y ahora se tiene 1,650. Otro aspecto adicional que añade Suárez, es que el 75% de los mercados de abastos son privados. En el caso de Lima el 99% son privados.
“Lo que hemos visto, es que los mercados han invertido alrededor de S/40 millones para sus mejoras. Hay una preocupación por mejorar, tal vez no suficiente”, indicó Apolonio Suárez.
“Este es un fenómeno de la microeconomía que tenemos que ver, que integran a los peladores, picadores, bodegueras”, expresó.
En tanto, sostiene que las empresas no deben perder la brújula en las avícolas y los autoservicios.
Consumo y producción
El consumo de pollos se eleva de 3% anual, mientras que la producción sube en 2.8% en el último año, sostiene el presidente de la APA.
“Hay una doble lectura, por un lado, hay una consolidación de algunas empresas del sector que se han fusionado, y por otro, han aparecido nuevos pequeños actores en el mercado”, indicó.
Sobre el consumo, sostiene que se esperaba una mayor recuperación para este año, pero la tendencia se mantiene.
Apolonio Suárez menciona que la industria avícola aporta en el 1.5% del PBI, alrededor de US$ 3,300 millones, y que espera que la reconversión de la industria sea un impulsor de su crecimiento.
Fuente: Gestión.pe