(Agraria.pe) En la campaña agrícola 2022/2023, del maíz amarillo duro llegaría a 296.200 hectáreas sembradas, que representaría un incremento de 13.6%, es decir 35.488 hectáreas más, comparado con el promedio de las últimas cinco campañas agrícolas para el mismo periodo que fue de 260.714 hectáreas.
Así lo informó la Dirección de Estudios Económicos del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), quien dijo que el escenario es impulsado por los mejores precios en el mercado internacional, la disponibilidad de la mano de obra, y las condiciones hidroclimáticas favorable.
La evaluación de las siembras de maíz amarillo duro, en el periodo de agosto a diciembre de la campaña agrícola 2022/2023, muestra un avance equivalente a 132 mil 324 hectáreas, lo que significa un incremento de 4,5% respecto al promedio de las últimas cinco campañas, el cual representa 126 mil 660 hectáreas.
Los departamentos que exhibieron un aumento de las áreas sembradas fueron San Martín (40.3%), Piura (47.9%), Ucayali (43.3%) y Amazonas (54.9%), principalmente. Pese a los altos costos de los principales insumos y fertilizantes, los productores han instalado mayores áreas maiceras en estos meses de la campaña; sin embargo, los mejores precios en promedio que reciben los productores vienen impulsando el incremento de las siembras. Hoy más de 200 mil productores se dedican a la producción de maíz.
Sobre los precios en chacra durante el 2022, se situaron por encima de años anteriores. La tendencia de los precios altos ha contribuido a que la cotización promedio en el último año fuera de S/ 1.40 por kilogramo, el cual es 14% mayor que lo cotizado en el año 2021, que fue de S/ 1.22 por kilogramo.
Mientras en el contexto global, los precios internacionales se mantienen elevados por efecto de una limitada oferta de maíz, presionada por una mayor demanda, lo que podría beneficiar a los productores nacionales y obtener mayores ingresos. Empero, también está condicionado al alza de los precios de los fertilizantes y el transporte, los cuales están generando un encarecimiento de sus costos de producción.
Respecto a las importaciones del 2022, el volumen disminuyó en 2.3% al registrarse en 3.56 millones de toneladas. Pero su valor ha aumentado en 16,3%, con un total de US$ 1,246.4 millones, debido a los altos precios internacionales del maíz amarillo duro.
