(Agraria.pe) Desde la Asociación de Gremio Productores Agrarios del Perú (AGAP), Gabriel Amaro anotó que debe realizarse una ley promotora del sector agrario que acerque a la pequeña agricultura a la modernidad. Asimismo, afirmó que este sector depende de muchos ministerios más que el de Agricultura y lamentó que el Ministerio de Trabajo y el Ministerio del Ambiente no se encuentren presentes en la reunión que tuvieron para la reactivación del sector.
Tomando en cuenta el último dato del INEI, el agro en septiembre ha caído más de 8% y, entre enero y septiembre la caída suma más de 3%, ¿cómo ve el sector del agro?
La situación del sector agrario en general es bastante compleja y difícil. No solamente por el tema de El Niño si no por una serie de eventos que han pasado desde hace unos años, quizá desde que derogaron la Ley de Promoción Agraria en el 2020, que es una ley para la formalidad agraria, tanto para la agricultura, la agroexportación como la agroindustria y que ayudó a formalizar el sector con un marco normativo adecuado para esta actividad económica.
Desde ahí comenzaron a suceder una serie de problemas, entre ellos la pandemia, los fertilizantes, la guerra, etc., y el gobierno anterior que fue un desastre y que creía que podía manejar el sector agrario, que es un sector económico, de manera ideológica, populista y política, con su Segunda Reforma Agraria que no sirvió para nada.
Lo que tenemos que buscar es la integración del pequeño agricultor a la cadena moderna y buscar esta transformación productiva y competitiva del sector agrario, desde el pequeño agricultor familiar, hasta la gran empresa.
Por eso, estamos pidiendo al gobierno que implemente un plan de reactivación económica para el sector, que es lo único que lo va a sacar adelante en esta época complicada de recesión y de decrecimiento económico, que no se ha visto en el sector agrario desde hace más de 26 años.
Ya hay una Ley Agraria creada en el 2020, una suerte de reemplazo de la Ley de Promoción de Inversión de la que usted ha sido crítico ¿Qué se puede esperar para el futuro? ¿se debe volver a esta ley o se puede añadir más cosas a la antigua ley y evolucionar a una ley 2.0?
Sí, todo tiene que evolucionar para hacerte más competitivo. En la política pública agraria tenemos que recuperar por un lado el carácter promotor de la Ley Agraria.
Yo soy crítico de la 31110 por varias razones; primero, porque la Ley de Promoción Agraria del 2020 se derogó durante la presidencia del Congreso de la señora Mirtha Vásquez y con la presidencia del señor Sagasti, que manejaron muy mal la situación de crisis en ese momento porque el problema era la informalidad. Esa ley ayudó a formalizar casi 10% de la agricultura.
Segundo, porque no sólo le bastó derogar esta ley de promoción adecuada para el sector, sino que, además, crearon una ley no desde la necesidad del productor agrario o de la empresa agraria, sino desde un interés ideológico, populista y político.
Por eso es que esta ley no funciona y está haciendo que la situación del sector agrario sea más crítica. El tema de la situación actual del sector agrario no se debe solo a El Niño, se debe a la política pública, entre ella, a la derogatoria de la Ley de Promoción Agraria.
¿Cuál sería una solución?
Nosotros creemos que debe realizarse una ley promotora del sector agrario, evolucionada, que ayude no sólo al sector formal sino a esa integración acelerada de la pequeña agricultura a la modernidad. Por otro lado, no solamente esa ley, porque mucho se habla de la gran responsabilidad del Ministerio de Agricultura pero dependemos de otros ministerios.
La agricultura depende del Ministerio de Economía y Finanzas, de la parte agroindustrial de Produce, del Ministerio de Trabajo, que no ha estado en las reuniones que hemos tenido con los ministros para conversar sobre la reactivación, como no estuvo la ministra del Ambiente. Hay mucha regulación ambiental que está mal hecha, es una regulación adaptada mal al sector agrario y está perjudicándolo. El Ministerio de Comercio Exterior, así como otros ministerios.
Por eso, se requiere de un esfuerzo del gobierno y del Congreso para sacar la nueva regulación. Nosotros vamos a hacer un aporte, tenemos propuestas en ese sentido, donde se mantengan beneficios, la seguridad en materia laboral, pero también que sea una ley que quite costos y riesgos innecesarios y que se adecúe a este sector económico tan importante como es la agricultura.
Ha mencionado el lado normativo, pero del lado económico ¿cómo esperan que termine en año y cómo le va a ir el 2024?
A setiembre ya hay un decrecimiento de más del 6% y el próximo año va a ser igual.
Fuente: El Comercio
