(Agraria.pe) Según el exministro de Agricultura, Milton Von Hesse, era necesario actualizar la Ley Forestal para dar estabilidad a los agricultores que cultivan en suelos deforestados desde hace muchos años, pero debe ser excepcional. Precisó que ahora la tarea es del Gobierno, a través del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), para conservar los bosques. También, los gobiernos regionales deben señalar cuáles son las áreas protegidas y garantizar que se mantengan intangibles.
El Congreso modificó la Ley Forestal, pero...
Es básicamente el artículo sobre la excepción que se otorga a la gente que hace agricultura sobre suelo que fue deforestado hace muchos años, que reconoce la tierra en función del mayor uso que se le está dando. Hace varias décadas clasificaron los suelos según la aptitud y la mayor cantidad de suelos productivos estaban clasificados para uso forestal y no solo en la Amazonía sino en la sierra y la costa. También, hace décadas, las áreas con aptitud forestal han sido deforestadas y ocupadas por agricultores. El Proyecto Olmos, por ejemplo, tiene suelos con aptitud para bosques, pero se desarrolla agricultura moderna.
En la Amazonía se cultivan café y cacao
Inclusive, hay agricultores que ya tienen título de propiedad, pero los suelos mantienen la condición de aptitud forestal. En tanto no tengan la condición de agrícola, los productos que se cultiven allí tendrán restricciones. La Unión Europea no aceptará ningún kilo de producto que se ha cultivado en área de bosque deforestado. Se debe tener Certificado de Uso de suelo que acredite que es de uso agrícola.
¿Ese es el detalle que facilita la nueva Ley?
Sí, pero se debe tener el Certificado de Uso de Suelo que certifica que ese terreno es de uso agrícola. Por estas cosas de regulación, ese suelo en el que se cultiva café y cacao aparecía como suelo forestal y no agrícola a pesar de estar titulado y que produce hace años. Con los cambios a la ley, ello será posible.
Pero, hay desacuerdo en el Ejecutivo
Sí, ha generado un conflicto entre el Ministerio de Desarrollo Agrario y de Riego (Midagri) y el Ministerio del Ambiente (Minam). La posición del Midagri es a favor de la agricultura y respalda a más de un millón de personas que viven de la agricultura en la Amazonía. Por otro lado, la del Minam es que no haya nada de agricultura y que los bosques no se toquen cuando hace muchos años se tocaron.
¿Y la posición del mercado?
Los promercado dicen que está bien el cambio de ley porque es la primacía de la realidad. El hecho de no cambiar la ley condena a miles de agricultores a seguir siendo errantes porque nada los arraiga, yendo de un lado a otro son propensos a deforestar, sin control.
¿Qué se debe corregir de la Ley?
En el Perú se tiene buenas leyes, pero el problema está en la implementación. El problema también está en el Congreso, tiene una vocación populista. Primero que el Estado haga bien su labor, sobre todo el SERFOR; los gobiernos regionales deben tener mapeadas las áreas de bosques que se deben proteger y mantener intangibles, hacer monitoreo permanente. Segundo, tiene que ser excepcional la entrega del título y de la certificación, que no se prorrogue eternamente.
¿La tala ilegal?
Se tiene que ir a un gran debate grande, serio, técnico. Desde mi punto de vista, hoy día, el sistema de concesiones, tal como se aplica, a cargo de los gobiernos regionales, no ha funcionado. Creo se debe repensar si las regiones pueden manejar un régimen de concesiones o es momento de recentralizar la función de concedente de bosque. El debate pendiente es qué hacemos para que los bosques no se depreden, pero generen ingresos. Se ha repartido concesiones forestales para explotación maderera en escala muy pequeña a amigos de las autoridades de turno, hay casos emblemáticos en la que la concesión sale a nombre de alguien que claramente no tenía capital ni capacidad técnica para explotar el bosque de forma sostenible.
Fuente: Correo