Con la hidroponía se producen verduras y hortalizas frescas y saludables, a diferencia de algunas que provienen del suelo, que son cultivadas con plaguicidas y con riegos sin garantía de salubridad.
(Agraria.pe) Inicialmente, la gerencia regional de Agricultura de Trujillo, en conjunto con algunas organizaciones locales, ejecutó de manera aislada y esporádica, la capacitación en cultivos hidropónicos, básicamente como pasatiempo de los beneficiados para su aprovechamiento casero. Sin embargo, ahora, esta práctica crece aceleradamente y con mucha demanda.
Las cosechas de esta actividad están pasando de la vecindad organizada, y del aprovisionamiento en casa, a los mercados de abastos, incluyendo a centros comerciales.
Es que la hidroponía es una tecnología de agricultura urbana en pequeños espacios de las viviendas. Es un cultivo sin suelo, un trabajo en agua con solución de nutrientes que contiene todos los elementos esenciales y vitales para el desarrollo de la planta.
Así se producen verduras y hortalizas frescas y saludables, a diferencia de algunas que provienen del suelo, que son cultivadas con plaguicidas y con riegos sin garantía de salubridad.
Los técnicos, que pertenecen a la Agencia Agraria de Trujillo, han capacitado a grupos de madres de las urbanizaciones La Rinconada y El Sol del Chacarero, instituciones educativas Ramiro Ñique y Rafael Narváez Cadenillas, así como profesores de la UGEL 4, entre otros.
Por su parte, el gerente regional de Agricultura (e), Ing. Segundo Bravo Díaz, ha expresado su interés y apoyo a esta actividad porque su finalidad es fomentar un modelo de desarrollo económico a nivel familiar, sobre todo en la población económicamente menos favorecida.
Lechugas repollada y de seda, espinaca, albahaca y algunas hortalizas cultivadas con hidroponía se pueden adquirir en diversos mercados, también en clubes de madres de El Porvenir. A esto, se añade la reanudación de cultivos hidropónicos en el invernadero de la subgerencia de Competitividad Agraria.
