Este problema, que podría afectar al 90% de los habitantes del país en zonas susceptibles, se estaría agravando por la deforestación y las variaciones del cambio climático.
Por: Francis Cruz
Agraria.pe.- Para este día Mundial de la Lucha contra la Desertificación y la Sequía, no hay motivos de celebración. Según los últimos datos del Ministerio del Ambiente (MINAM) aseguran que alrededor del 27% de la superficie del país está expuesta al proceso de desertificación y degradación de la tierra, y que el 90% de los peruanos vive en zonas susceptibles a estos procesos.
Estos cambios en los suelos también podrían tener implicancias directas en cultivos que antes eran húmedos, como el café y el cacao, y que podrían pasar a declararse desérticos, con los consiguientes problemas económicos para los campesinos.
El jefe de proyectos de la Ong ITDG Soluciones Prácticas y especialista en bosques, Jorge Elliot, informó a Agraria.pe que una de las medidas para solucionar la degradación del ecosistema sería el manejo eficiente de agua en zonas de captación, para a su vez evitar el desabastecimiento del recurso hídrico en las ciudades.
Según Elliot, la región de San Martín desarrolló un proyecto denominado Programa de Desarrollo Agroambiental en Ceja de Selva (PROCEJA) que cuenta con un presupuesto de 7,1 millones como fondos no reembolsables proporcionados por el gobierno alemán y con un monto de 8,3 millones por parte del gobierno regional.
Dicho programa pretende el manejo sostenible de los bosques y suelos de las cuencas de los ríos Mishquiyacu y Ponaza en la provincia de Picota, con un fuerte componente de irrigación y forestación.
Asimismo, el especialista de ITDG informó de desabastecimiento de agua y electricidad en San Martín. La falta de lluvias ha hecho que el cultivo del café -que ocupa normalmente una cosecha al año- vaya a tener dos cosechas. La primera está perdida por el achicamiento del grano, aclaró.
Medidas estatales
Por su parte, el MINAM realizará una serie de seminarios y talleres entre los días 17 y 25 de junio en Piura, Lima, Arequipa y Tacna, con el objetivo de sensibilizar a la población sobre la necesidad de lograr el manejo sostenible de la tierra.
Estos eventos que llevan el lema de Mejorando los suelos en un lugar, se encuadran dentro de las políticas del MINAM para luchar contra la desertificación y la degradación de la tierra, poniendo especial énfasis en el manejo sostenible como herramienta para revertir la degradación y promover las buenas prácticas agrícolas, forestales y de gestión de recursos hídricos.
El día 18 de junio se celebrará en Piura el seminario Intercambio de Experiencias Regionales en la Lucha Contra la Desertificación y Sequía, que contará con autoridades del Gobierno Regional de Piura, actores de las instituciones públicas y privadas, Ongs, comunidades campesinas y organizaciones de base.
De igual manera Arequipa será sede del 23 al 25 de junio del Curso de Inducción a la Gestión de Cambio Climático y Desertificación, el cual considera la participación de las regiones Puno, Cuzco, Apurímac, Tacna y Moquegua; quienes conforman la Asociación Regional Sur de Lucha contra la Desertificación y Sequía (ARSULDES).
Finalmente en Tacna, el Seminario Taller: Lucha Contra la Desertificación y Mitigación de los efectos de la Sequía, tratará de divulgar información relativa a la nueva Ley de Recursos Hídricos y a la creación de los Consejos de Recursos Hídricos de Cuenca a nivel regional.
La totalidad de estas actividades se ubicarían en la costa debido a que esta región natural presenta una gran incidencia de desertificación causada por la salinización del suelo por excesivo riego y mal drenaje, afectando al 40% de los suelos de mejor calidad del país.
El MINAM indicó que, con el manejo sostenible de tierra y uso racional del agua, se podría evitar el derroche del recurso hídrico en los cultivos de arroz, una de las principales producciones de la costa norte.
Por ello, los megaproyectos agrícolas en la costa norte como Olmos, Alto Piura y Chinecas deben estimar y proponer el uso racional del agua para riego y, por ende, garantizar el manejo sostenible de la tierra.
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