El 30 de agosto, Cañete cumplió 459 años de fundación española. Según el último censo agropecuario, ésta provincia tiene 85,561 hectáreas de cultivo bajo riego, siendo las cuencas del rio Cañete y del rio Mala, las de mayor importancia en la producción provincial. Cañete, a través de su historia, le ha dado al Perú divisas con la exportación de azúcar y algodón; alimentación con sus cultivos de panllevar y tecnología con las otroras estaciones experimentales privadas que tenía.
Tucumán, lugar donde se declaró la independencia Argentina en 1816, fue sede de una reunión internacional de agronegocios, a la que asistí gracias a la invitación del IICA. En los talleres del evento participaron importantes representantes de los sectores público y privado de diez países de Sudamérica. El resultado del cónclave fue dar inicio a lo que será la Red Sudamericana de Agronegocios que tendrá la finalidad de promover la integración comercial y del conocimiento de nuestros países.
Ha sido una vivencia aleccionadora y también pudimos aportar con nuestra experiencia adquirida con la Red Peruana de Agronegocios (www.agronegocios.pe) tenemos grandes retos por delante en cuanto a integración física, energética y laboral. Sin embargo, el reto más grande y trascendental será romper todos los obstáculos al comercio que por lo general nos ponen países como Brasil y Argentina; muchas veces también Colombia y Ecuador. Lograr esto no solo pasa por la diplomacia de los países, sino por la mayor integración entre instituciones y en ese sentido la reunión de Tucumán ha sido muy importante.
Nuestra región debe trascender a la Comunidad Andina y al Mercosur, espacios de integración que han tenido poco éxito en promover mayor flujo comercial, superar los obstáculos técnicos e implementar mecanismos rápidos de solución de controversias. Perú puede estar en la misma latitud que Brasil pero su agroexportación está representada, en su mayoría, por productos no tropicales; del mismo modo tenemos enorme complementariedad con Argentina cuya agricultura está más orientada a los commodities. Estos dos países debieran ser objetivos naturales de la política comercial peruana, sus 250 millones de habitantes con un PBI per cápita cercano a los USD 10 mil nos dan una idea del tamaño del mercado (10 veces el mercado nacional).
Si Nicomedes Santa Cruz en sus ritmos negros del Perú, mencionaba de “Cañete a Tombuctú” para referirse a la influencia africana en nuestro país; ahora de “Cañete a Tucumán” puede ser el primer paso para la real integración comercial latinoamericana.