(Agraria.pe) El presidente de la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP), Alejandro Fuentes, sostuvo que la nueva ley agraria -que eleva el ingreso diario de los trabajadores agrarios de S/ 39.2 a S/ 48.5, a través de un bono mensual de 30% de la RMV de carácter no remunerativo- no es viable y que uno de sus principales efectos será el aumento de la informalidad laboral, debido a que las pequeñas y medianas empresas no van a poder soportar “un incremento de esa magnitud”.
“Algunos voceros dicen que los pequeños (productores agrarios) no se verán afectados (con la nueva ley) porque están en un régimen laboral distinto, lo cual es falso porque el régimen laboral agrario es uno solo”, acotó.
Agregó que en promedio las empresas agroindustriales con más de 100 trabajadores pagan S/ 1.543 al mes, que es lo que dice la planilla electrónica del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) al 2019.
“La diferencia entre el mínimo y el promedio se da por el bono de productividad que es conocido como destajo, por la que se reconoce al trabajador por su talento y capacidad versus a alguna persona que no tiene experiencia todavía”, refirió.
En esa línea, remarcó que ahora el bono -con la ley publicada- se les está dando a todos los trabajadores agrarios sin medir la productividad, perjudicándose a los trabajadores con más años, conocimientos y, por ende, más productivos, sobre otros que recién están ganando experiencia, pero que también recibirán -con la nueva ley- el incremento de 30% de la RMV.
“Ese pago (bono) era en función de la productividad, pero ahora se les está subiendo a todos la remuneración y aquellos trabajadores más productivos son los que se van a ser más perjudicados porque con el incremento artificial que se ha dado, pues (ya) no es sostenible estos bonos de productividad que tenían antes. Los trabajadores más productivos van a terminar subsidiando a los menos productivos”, advirtió.
Igualmente dijo que se espera para los próximos años que el sector agroindustrial crezca, pero será por efecto de la Ley de Promoción Agraria dado que las inversiones hechas por este sector son de largo plazo y recién verán su fruto entre el 2024 y 2025.
Fuente: Gestión