(Agraria.pe) El presidente de la República, Pedro Castillo, dijo que la segunda reforma agraria que impulsa su gobierno es la respuesta a las inequidades sociales que por décadas han vivido los productores agrarios en el país, y que el objetivo de esta política es alcanzar la seguridad alimentaria y el desarrollo rural.
En su participación virtual en el Foro Mundial de Alimentación de la FAO, que se realiza en Roma, el jefe de Estado peruano dijo que “años de descuidos y de sistemas injustos, han permitido que la desnutrición crónica infantil, y en áreas rurales en mi país, sea tres veces mayor que en las áreas urbanas”.
Además, el 70% de distritos del Perú presentan altos niveles de vulnerabilidad y la inseguridad alimentaria, mientras que el 60% de los distritos cuentan con potencial productivo efectivo medio o alto.
Según el mandatario, otro factor de inequidad en el campo, es que la población rural dedicada a la pequeña agricultura, que representa el 84% de los productores en el mundo, y producen el 36% de alimentos, a pesar de ser indispensables para nuestra sobrevivencia, solo utiliza el 12% de la tierra agrícola.
Según el informe sobre el estado de la seguridad alimentaria y nutrición en el mundo, en el Perú la mitad de nuestra población, alrededor de 16 millones de peruanos, están viviendo en inseguridad alimentaria, acompañado de un incremento de la pobreza debido al grave impacto de la pandemia.
Promoción del cooperativismo
“Conscientes de estas inequidades, nuestro gobierno ha emprendido la segunda reforma agraria, política que busca alcanzar la seguridad agroalimentaria y el desarrollo rural, mediante la producción sostenible de la agricultura familiar, especialmente desde los productores en pequeña escala, que representan el 88% de las unidades agropecuarias en nuestro país”, señaló en su discurso.
En ese sentido, detalló que los ejes prioritarios de esa política incluyen, entre otros, la promoción del cooperativismo, con miras a incrementar la producción; la productividad, y la inserción a mercados, el mejoramiento y ampliación de la infraestructura hidráulica, incluyendo conocimientos ancestrales, como la siembra y cosecha de agua.
Asimismo, el fortalecimiento de los programas de asistencia técnica y capacitación, la industrialización rural, mediante la integración vertical, y la mejora del acceso a financiamiento y a los mercados de la pequeña agricultura, así como el repoblamiento ganadero, mejorando pastos y genética.
Ante el foro de la FAO, Castillo Terrones detalló también que la segunda reforma agraria impulsa inversiones dirigidas a los jóvenes, a las mujeres, a las comunidades y a los pueblos originarios que, por demasiado tiempo, han permanecido excluidos de los beneficios del desarrollo.
Paralelamente, anotó, se viene reforzando los programas sociales, para brindar apoyo directo a las familias con mayores necesidades. “Estamos fortaleciendo a las organizaciones de base, como las ollas comunes y otras iniciativas vecinales autogestionarias de apoyo o atención alimentaria”, dijo.
En otro momento, el presidente remarcó que a través del Programa Nacional de Alimentación Escolar - Qali Warma, se ha logrado dar cobertura a más de 4 millones de estudiantes en escuelas de todo el país que son atendidos mediante los comités de alimentación escolar y recibieron en el último año cerca de 27.000 toneladas de alimentos.
Sostuvo además que otro de los temas de especial atención para el Gobierno ha sido la reactivación de los centros infantiles de atención integral del programa “Cuna más”, para atender a niños menores de 36 meses.
“La implementación de estas políticas alimentarias es fundamental debido a que ha habido años de descuido y sistemas injustos que han generado que más 16 millones de peruanos estén viviendo en con déficit de alimentación”, puntualizó.
Fuente: El Peruano