(Agraria.pe) Un total de 14.800 hectáreas de espacios naturales altoandinos, entre bosques y bofedales, se han recuperado y conservado adecuadamente gracias a un proyecto desarrollado por el Ministerio del Ambiente (Minam) en Cañete (Lima) y Jequetepeque (Cajamarca).
Según información de la Dirección General de Economía y Financiamiento Ambiental del Minam, el Proyecto de conservación y uso sostenible de ecosistemas altoandinos del Perú a través del pago por servicios ambientales para el alivio de la pobreza rural y la inclusión social (Proyecto Merese-FIDA) ha beneficiado a 1.510 familias en los distritos de intervención directa y a 732.000 personas por el servicio ecosistémico hídrico en los ámbitos de las cuencas Cañete y Jequetepeque.
Esta acción sectorial constituye un innovador modelo de gestión efectiva, porque enfatiza en el fortalecimiento de capacidades de las comunidades que implementan las acciones de recuperación y conservación, y refuerza la institucionalidad para implementar los Mecanismos de Retribución por Servicios Ecosistémicos (Merese), en un trabajo colectivo para garantizar la conservación de ecosistemas que proveen de agua a los diversos usuarios de las cuencas.
Ecosistemas altoandinos
Los ecosistemas altoandinos, como los pastos naturales, bosques nativos y bofedales, son las nacientes y reservas de agua que benefician tanto a las poblaciones locales como a las asentadas en las partes bajas de una cuenca. Cuando estos espacios naturales se encuentran en buen estado de conservación brindan beneficios sociales, ambientales y económicos, tales como la provisión de agua, el mantenimiento de la biodiversidad y belleza paisajística, entre otros.
Estos territorios son afectados muchas veces por la implementación de prácticas no sostenibles, como el sobrepastoreo, la deforestación excesiva y el drenaje de bofedales, entre otras acciones, lo que ha producido que actualmente nuestro país tenga más de 15 millones de hectáreas de ecosistemas degradados, situación que en un contexto de cambio climático pone en riesgo la seguridad hídrica y alimentaria al país.
Intervención sectorial
Frente a dicha situación, el Ministerio del Ambiente implementa diversas estrategias e instrumentos, como la formulación de proyectos de inversión pública o acuerdos voluntarios de conservación.
Uno de estos instrumentos son los Merese. Estos son instrumentos financieros verdes que buscan asegurar la provisión de los servicios ecosistémicos, como la disponibilidad de agua en calidad y cantidad adecuada.
Los Merese que se enfocan en la provisión de este servicio ecosistémico se establecen en una determinada cuenca, entre las personas que se benefician del servicio ecosistémico (retribuyentes) y las que ayudan a conservar o recuperar los ecosistemas (contribuyentes), para asegurar la provisión de dicho servicio ambiental.
Estos mecanismos resultan efectivos para balancear la conservación y recuperación de ecosistemas saludables con la gobernanza local, involucrando a los actores y desarrollando espacios de consenso entre ellos para asegurar la sostenibilidad de las acciones.
La experiencia del Minam desarrollada en Cañete y Jequetepeque mediante el Proyecto conservación y uso sostenible de ecosistemas altoandinos del Perú a través del pago por servicios ambientales para el alivio de la pobreza rural y la inclusión social (Proyecto Merese-FIDA), ha sido calificada como finalista en el premio Buenas Práctica en Gestión Pública, organizado por la ONG Ciudadanos Al Día, que identifica y reconoce las experiencias exitosas en el sector público peruano orientadas a brindar mejores servicios a la ciudadanía.