Las empresas podrán acceder a créditos para invertir en plantaciones forestales.
(Agraria.pe) La reforestación de bosques tiene gran potencial y dentro de quince años se debería exportar alrededor de US$ 2.000 millones con las plantaciones que hayan entrado en cosecha, además de generar más de un millón de puestos de trabajo si se cumple con el objetivo de las dos millones de hectáreas plantadas al 2030, señaló el gerente general de Reforestadora Amazónica, Felipe Koechlin Arce.
Mencionó que la Asociación de Exportadores (Adex) lidera un importante esfuerzo por consolidar y asegurar la sostenibilidad de este sector. Además, explicó que la promulgación del Decreto Legislativo N° 1223 que fortalece el Fondo Mipyme permitirá que pequeñas y medianas empresas puedan invertir en manejo de bosques y plantaciones forestales. Agregó que de esa forma, se aprovecharía una cantidad importante de hectáreas deforestadas que están abandonadas.
“Hoy Perú tiene 30 mil hectáreas bien manejadas y con fines comerciales, pero el país tiene un potencial de reforestación inmenso. Estas medidas permitirán que predios que actualmente no están siendo utilizados se vuelvan productivos”, declaró.
Koechlin Arce indicó que el D.L. 1223, publicado el pasado 25 de septiembre en El Peruano, permitirá que las empresas accedan a créditos a largo plazo de entidades financieras privadas para invertir en manejo de bosques, cuyos beneficios podrían verse al año. En el caso de la reforestación, se necesita más tiempo para lograr resultados.
“El resultado de la inversión en reforestación se verá después de diez años aproximadamente, este largo plazo es un ‘cuello de botella’ que existió históricamente para algunos empresarios interesados. Por este motivo Perú nunca desarrolló el tema forestal a pesar de tener ventajas como país. Ahora, con la posibilidad de financiar los proyectos de reforestación a diez años, se podrá desarrollar la Amazonía peruana”, subrayó.
Indicó que el siguiente paso para lograr el desarrollo del bosque peruano es que La Corporación Financiera de Desarrollo (COFIDE), y que los bancos comerciales se pongan de acuerdo y empiecen a sacar los créditos para que las empresas, dedicadas tanto al manejo de bosques como a plantaciones forestales puedan acceder a ellos.