(Agraria.pe) El Centro Internacional de la Papa (CIP) inauguró esta semana su nuevo criobanco de última generación en Lima, el más grande su tipo en el Perú, y donde se preservarán unas 3600 accesiones de papa estandartes de la biodiversidad.
Durante el evento, que contó con la participación de diversos funcionarios del sector, tomó la palabra el ministro de Agricultura y Riego, Ángel Manero, quien recordó que Perú es primer exportador mundial de arándanos, de uva de mesa, segundo de paltas, tercero de mago, todos alimentos que provinieron de otras latitudes, pero que, en cambio, no destacaba en la comercialización internacional de papa, un cultivo oriundo del país con una historia que empieza hace casi 8 mil años.
Como parte de esa tarea pendiente por hacer de la papa peruana protagonista de una nueva historia de éxito en la agricultura con valor agregado, destacó que este año se vio el primer gran esfuerzo de industrialización del tubérculo con una inversión privada de 15 millones de dólares (de la marca “Tiyapuy”, liderada por Carlos Añaños) para el desarrollo y exportación de hojuelas de papas nativas. “Esta planta permitirá exportar el próximo año más de 80 millones de dólares, y lo más importante es que los pedidos de esta empresa superan los cientos de millones de dólares; la proyección que vemos, solo hablando de exportación de papas nativas, es tremendamente grande para el Perú”, apunto Manero.
Agregó que este nuevo capítulo en la industrialización de la papa nativa peruana es la consecuencia de un largo proceso de análisis e investigación que empezó en instituciones como el CIP, que asumieron el reto de caracterizar y almacenar la riqueza biológica del país.
Conexión con el mundo
Dentro de ese impulso, el titular del Midagri sostuvo que el Perú debe aprovechar su conexión con el mundo demostrada en la reciente realización del foro APEC en nuestro país, donde se reunieron líderes que concentran el 60% de la economía mundial, y quedó claro que, de la mano con el sector privado, se puede aprovechar los vacíos del mercado internacional con la presencia de los productos de la biodiversidad peruana. En esa perspectiva listó no solo a las papas nativas, sino también al maíz blanco de Urubamba con gran potencial, así como la fibra de camélidos, y a los granos andinos como el tarwi, de gran valor proteico. “Vemos como nunca ahora la hoja de ruta clara de cómo los mercados internacionales pueden beneficiar a los pequeños productores”, complementó.
En el marco de ese esfuerzo, informó que la semana pasada, durante la visita del director general de la FAO, se firmaron acuerdos para que grandes empresas del sector privado ayuden a los pequeños agricultores de tal forma que sus productos emblemáticos de la biodiversidad lleguen a los mercados del bloque APEC.
“De modo que la inauguración de este criobanco del CIP llega en el momento exacto, porque ayuda a fortalecer la imagen del Perú, así como su posicionamiento como país potente en biodiversidad, y más aún, como país que puede aprovechar las oportunidades del mercado para que la biodiversidad beneficie a las poblaciones locales”, concluyó.