Extracción de péptidos de estos subproductos agroalimentarios puede añadirse a yogures, bebidas y productos cárnicos para proporcionar propiedades antioxidantes, antihipertensivas e hipocolesterolémicas.
(Agraria.pe) Un nuevo uso para los elementos que se consideraban deshechos. Es lo que ha logrado una investigación del grupo de Técnica de (Micro)-Separación de la Universidad de Alcalá de Henares en España con los huesos de las aceitunas y duraznos.
Según informa la web “portalfruticola.com”, investigadores del grupo de Técnicas de (Micro)-Separación de la Universidad de Alcalá de Henrares (UAH) en España, desarrollan un proyecto basado en añadir ingredientes bioactivos procedentes de huesos de melocotón (durazno) y aceituna a alimentos como yogures, bebidas de frutas y verduras, y productos cárnicos en general. De esta forma, se les estaría adicionando propiedades antioxidantes, antihipertensivas e hipocolesterolémicas.
De acuerdo a la responsable de este trabajo en la UAH, María Concepción García, los huesos de frutas como el melocotón o la aceituna son fuentes importantes de ingredientes funcionales como los péptidos bioactivos, elementos que es necesario extraer y caracterizar para proponer estrategias adecuadas para su reutilización.
La universidad explicó además que este tipo de alimentos funcionales son cada vez más demandados en el mercado debido a la conciencia que existe del impacto en la salud de conductas de consumo alimentario no saludables.
Además, esta aplicación de péptidos provenientes de huesos de durazno y aceituna significa un impacto ambiental positivo, pues se trata de residuos agroalimentarios que en vez de ser desechados se aprovechan con valor añadido.
