(Agraria.pe) El Grupo Banco Mundial ha presentado un paquete integral de iniciativas para abordar urgentemente la pobreza y el hambre, y permitir que las personas vulnerables aumenten sus ingresos, mejoren su resiliencia frente a las crisis climáticas y promuevan el empoderamiento de las mujeres y las niñas.
El Grupo Banco Mundial anunció:
“En pocas palabras: el hambre y la pobreza están entrelazadas. Tenemos que hacerles frente y trabajar duro para liberar a nuestro mundo de ambos flagelos”, afirmó Ajay Banga, presidente del Grupo Banco Mundial. “Nuestros programas de protección social tienen como objetivo llevar comida a la mesa, proteger los medios de vida y ayudar a las familias pobres a pagar los servicios básicos de salud y educación de sus hijos. Alcanzar esta ambición requerirá una fuerte colaboración entre países y socios como la Alianza Global, para compartir conocimiento e impulsar la financiación”.
Como parte de la iniciativa, la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el fondo del Grupo Banco Mundial para los más necesitados, facilitará financiación a los países para que la utilicen en políticas que respondan al hambre y la pobreza. La AIF es la principal fuente de subvenciones y financiación en condiciones favorables para luchar contra la pobreza y el hambre.
Según cifras publicadas por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 700 millones de personas en todo el mundo sufren de hambre.
El Grupo Banco Mundial seguirá adaptando las intervenciones en función de las necesidades específicas de los países, utilizando una combinación de programas de protección social que han demostrado ayudar a las familias pobres a ganarse la vida dignamente y superar la pobreza extrema y el hambre. Entre ellos, se incluyen el apoyo a los ingresos básicos, el acceso al capital inicial, el ahorro y la formación, el asesoramiento y la tutoría. Basándose en los datos más recientes, también aprovechará los programas de protección social como herramienta para hacer frente a los efectos adversos del cambio climático y promover la igualdad de género. La Academia de Conocimientos del Banco Mundial colaborará estrechamente con los países para compartir estas soluciones basados en datos empíricos.