(Agraria.pe) En 2020, las exportaciones peruanas de espárragos en todas sus presentaciones (fresco, conserva y congelado) sumaron 158.317.000 kilos por US$ 488.618.000, lo que muestra una caída de -8.8% en volumen y -8.4% en valor frente a los 173.800.000 kilos por US$ 533.292.000 alcanzados en 2019.
Así lo señaló el director ejecutivo del Instituto Peruano del Espárrago y Hortalizas (IPEH), Carlos Zamorano Macchiavello, quien sostuvo que la principal partida es en fresco, cuyos despachos en 2020 ascendieron a 119.022.000 kilos por US$ 359.800.000, en comparación a los 131.700.000 kilos por US$ 393.700.000 obtenidos por igual concepto el año previo, registrando una disminución de -9.63% en volumen y -8.61% en valor.
Por su parte, los envíos de espárragos en conserva en 2020 alcanzaron los 31.419.000 kilos por US$ 94.296.000, cuando en 2019 fueron 32.120.000 kilos por US$ 97.384.000, notándose una contracción de -2.18% en volumen y -3.17% en valor.
Mientras que en 2020 las exportaciones de espárragos congelados sumaron 7.800.000 kilos por US$ 34.400.000 versus los 10.100.000 kilos por US$ 42.143.000 del 2019, observándose una caída de -22.77% en volumen y -18.37% en valor.
Carlos Zamorano señaló que los problemas que tuvo el espárrago el año que acaba de culminar fueron coyunturales, a consecuencia del Covid-19, impidiendo gestiones comerciales, restricciones en el campo (no se cosechó porque lo trabajadores no salían de sus casas por temor a contagiarse), el cierre del canal horeca en los mercados destinos. Así como las restricciones en los vuelos comerciales y el encarecimiento de los fletes aéreos por la menor frecuencia de vuelos de carga (por la alta demanda), lo que hizo que se convierta en un negocio marítimo.
Asimismo, dijo que a fines de 2020 la huelga de los trabajadores agrarios, sobretodo en Ica, (quienes pidieron la derogatoria de la Ley de Promoción Agraria), obligó a cerrar fundos y no cosechar la hortaliza en plena campaña grande. “Esa es la realidad del espárrago, veremos cómo se pone de pie este año y cómo resiste este tema de los efectos de la nueva ley agraria”.
El director ejecutivo del IPEH dijo que, en el primer semestre de 2020, la caída en las exportaciones de espárrago era mayor respecto al mismo periodo de 2019, sin embargo, a partir del segundo semestre del año, cuando comienza la campaña grande, el sector repuntó algo.
Se esperaba que mucho espárrago fresco se destine al congelado y los despachos de esta presentación se incremente, sin embargo, un alto porcentaje del espárrago congelado se dirige al canal horeca (hoteles, restaurantes y catering) que prácticamente estuvo cerrado.
Menor competitividad
En otro momento, Zamorano Macchiavello destacó que el encarecimiento de los fletes aéreos afecta directamente los márgenes de ganancia en la industria esparraguera (que de por sí tiene poco margen), por lo que ha habido mayores envíos de espárrago procedente de Perú a Estados Unidos vía marítima.
A ello se suma la presencia del espárrago mexicano que crece cada vez más y compite con nuestra oferta en el principal mercado que es Estados Unidos. Indicó que México tiene la ventaja de estar al costado de Estados Unidos, por lo que su oferta puede llegar en camión en poco tiempo y a menos costo por los fletes.
“Perú no va a tener repunte en el mercado estadounidense en la medida que no mejoremos las condiciones de ingreso de nuestro espárrago a dicho destino. Actualmente el requisito exigido por las autoridades estadounidenses es que la hortaliza se fumigue, eso ataca el meollo del negocio, ataca la rentabilidad, ya que aparte de sumarle un sobrecosto, afecta la vida de anaquel del producto, e impide ofrecer presentaciones con valor agregado, reduciéndonos competitividad “, sostuvo.
En ese sentido, dijo que las autoridades fitosanitarias de ambos países -APHIS (de Estados Unidos) y Senasa (de Perú)- vienen trabajando para eliminar el requisito de fumigación al espárrago peruano, sin embargo, la entidad estadounidense se ha quedado algo “dormida”, por lo que es necesario el apoyo político por parte de las autoridades de Perú para que empuje el tema y por el otro lado, que tengan políticamente la capacidad y decisión de indicar que luego de analizar bien el tema y después de 11 años de fumigación y estudios de todo tipo no hay riesgos y se permita al inicio planes pilotos para despachar espárragos frescos sin fumigación.
“Lo último que se hizo fue identificar molecularmente plagas en producto terminado (en plantas de empaque) pero el APHIS no termina de enviar los resultados finales totales del estudio. Sabemos que no hay plagas nuevas; con esos resultados se debería retomar las conversaciones, ya no hay más discusiones técnicas, toca enfrentar el tema y solucionarlo de una vez. Si se obtiene eso sería un cambio total para la industria del espárrago”, manifestó.
Sobre nuevos mercados para el espárrago peruano, el representante del IPEH indicó que se busca la reapertura del mercado australiano, por lo que su representada, junto al Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), han realizado pruebas para dominar el tema de trips y estiman estar listos para tentar una reapertura de ese mercado.