Qultivo Perú procesa el fruto y lo convierte en deliciosos productos innovadores, sacando provecho incluso a los de descarte.
(Agraria.pe) Con un área pequeña de producción en Tacna, Julio César y Leonardo Zegarra, hijo y padre, vieron que era muy complicado pensar en la exportación de sus granadas en fresco. Fue entonces que se enteraron que en el CITEagroindustrial Moquegua estaban dándole valor agregado al fruto. Ahí se les prendió el ‘foco’ emprendedor.
Julio César, que es gerente de Qultivo Perú, comentó que fue así como decidieron desarrollar zumo, licor, jalea y hasta chocolates con la granada, según declaraciones que recoge el Instituto Tecnológico de la Producción (ITP).
“El CITE trabajó lo que es un zumo de granada, eso llegó a mi conocimiento. Nos contactamos con ellos, y así nace el vínculo ya que de otra manera no tendría las herramientas técnicas (de procesamiento). Tengo este emprendimiento ya que mi papá tiene una chacra; qué mejor que explotarlo antes que trabajar para otros”, refirió.
El ITP detalla que la producción de Qultivo Perú se centra especialmente en el procesamiento del los arilos de granada. En el caso del licor, por ejemplo, este insumo se macera con aguardientes por un periodo de 25 días. Posteriormente se realiza una filtración para retirar los arilos y combinar el aguardiente con jarabe de goma, así como otros insumos, lo que permite obtener un licor de agradable sabor.
Para el caso de la jalea, se concentra el jugo natural de la granada a través de procesos mecánicos (cortado, desgranado y prensado), para luego someterlo a cocción y concentrar el jugo obtenido. Asimismo, se desarrollan bombones y zumo.
Todos los productos -resalta el ITP- se elaboran usando fruta de descarte en campo que no se puede comercializar. Esto equivale al 10% de la producción total. La entidad apoya con especialistas en todo este desarrollo a esta línea de emprendimientos.
Leonardo Zegarra, quien es socio de la empresa tacneña, remarcó que la granada tiene muchas propiedades nutritivas y medicinales, por lo que cuenta con un mercado insaciable en Europa. De hecho, tras la experiencia con este fruto, ya está pensando en más alternativas.
“Tengo muchos productos a los cuales darle valor agregado. Estoy sembrando moringa, pitahaya; hay mucho que pensar en el futuro. Si tenemos plantas como esta (el CITEagroindustrial Moquegua) a nivel nacional, podemos darle valor agregado a muchos productos. Tienen la consigna de no perder ni las cáscaras de todos los frutos”, refrendó.
