La Confederación Nacional Agraria (CNA) solicitó al nuevo ministro de Agricultura y Riego retomar el debate sobre la regulación del tamaño de la propiedad de las tierras, que afecta la agricultura familiar y el manejo justo de los recursos como el agua.
Por: Redacción
Lima, 28 de febrero de 2014 (Agraria.pe) La Confederación Nacional Agraria (CNA) –a través de un comunicado- se pronunció acerca del cambio de titular del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), cuya responsabilidad recayó en Juan Manuel Benites Ramos.
Al respecto, señaló que la reciente designación representa un momento decisivo para reorientar la política sectorial de la agricultura en nuestro país, que en los últimos años se ha centrado en el agronegocio con prioridad en intervenciones en la costa, apoyando a las grandes empresas agrícolas con programas de irrigación de alto costo.
En ese sentido, la CNA solicitó al nuevo ministro de Agricultura y Riego retomar el debate sobre la regulación del tamaño de la propiedad de las tierras, que afecta la agricultura familiar y el manejo justo de los recursos como el agua.
“Esta es una tarea pendiente, que el anterior ministro dejó de lado, aludiendo que era necesario esperar los resultados del Censo Agrario. Ahora que ya contamos con ellos es indispensable retomar el diálogo frente al acaparamiento de propiedad de tierras”, señala el comunicado.
Asimismo, la CNA resaltó las expectativas de las comunidades agrarias respecto a la actualización del Proyecto: "Catastro, Titulación y Registro de Tierras Rurales en el Perú, Tercera Etapa-PTRT-3", labor que ha sido encomendada al Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
“El BID diseñará una estrategia que garantice la seguridad jurídica de las comunidades campesinas indígenas y que sea coherente con los derechos colectivos y las normas internacionales para la defensa de los derechos colectivos, entre los que destacan el derecho a la consulta y al territorio”, señala el comunicado.
Por último, la CNA manifestó que esperan de la nueva gestión ¨un real compromiso¨ con la pequeña y mediana agricultura que permita diseñar políticas y estrategias concretas para orientar los recursos del Estado eficientemente a un real empoderamiento de este sector, ya que es sin duda una actividad potencial para la producción nacional.
