Las condiciones climáticas son favorables para este cultivo, cuyas características encajan perfectamente además con el formato de los pequeños productores. Sin embargo, falta convencer a los inversores.
(Agraria.pe) Habrá que esforzarse todavía mucho más para que la industria de los berries –más allá del arándano- prenda en nuestro país. Alfonso Velásquez, presidente ejecutivo de Sierra y Selva Exportadora, comenta que la iniciativa de fomentar el cultivo de estos frutos en Cajamarca (especialmente la frambuesa) va a un ritmo menor de lo esperado, aunque el objetivo sigue siendo convertir a los productores de esa zona del país en protagonistas agroexportadores de primera línea.
“Va lento porque no tuvimos la respuesta promotora e innovadora de las otras instancias de gestión, pero no perdemos la oportunidad, queremos ver a nuestro país liderando en frambuesa como en arándano. La experiencia de países como Chile y Argentina nos demuestra que la frambuesa es para el pequeño productor, de 1 a 2 hectáreas; el promedio de siembra en Chile es de 0.6 hectáreas, en Serbia es de 0.3, en Polonia 0.7, y son grandes productores europeos. En Estados Unidos sí es más grande el hectareaje -10 a 20 ha-, y los sembradores de frambuesa del estado de Washington por ejemplo son todos gente acaudalada con este único cultivo”, señaló el funcionario en declaraciones para Agraria.pe.
Destacó en esa línea que la oportunidad es grande para nuestro país en este rubro pues cuenta con las horas de frío adecuadas en la zona andina, especialmente en Cajamarca, donde hay disponibilidad de agua y recursos. Lo que falta es la decisión de invertir. “Si fuera fácil ya estaría hecho”, comenta Velásquez, quien agrega que el trabajo tiene que ir acompañado de un proceso de convencimiento con parcelas demostrativas, de tal forma que se dé en los cajamarquinos una disposición por sembrar este producto.
“Pero coincide con el mal momento que todavía subsiste en Cajamarca por la reducción de la inversión privada. No hay excedentes, faltan recursos. Esperemos que las instituciones de fomento, financieras, se decidan a apoyar esta dinámica de cambio hacia productos innovadores. Auguramos éxito a esta propuesta, la perseverancia va a ser la mejor receta y estamos seguros que pronto veremos a Cajamarca y otras regiones peruanas convertidas en grandes productoras de frambuesas”, sostuvo.
Hacia el cooperativismo
En cuanto al enfoque de la gestión de Sierra y Selva Exportadora hacia adelante, Velásquez señaló que se hará especial énfasis en la promoción del concepto de cooperativismo, pues lo considera el mejor mensaje de fomento de la asociatividad.
“Un pequeño productor puede entregar su producto a la cooperativa para que se comercialice a precio de volumen grande… el acto cooperativo permite que el productor de un saco tenga el mismo retorno que el que produjo mil sacos de un producto, por eso decidimos trabajar fuerte en la búsqueda de alianzas, en mostrar lo positivo que es este sistema tributariamente, en cuanto a la formalización de los grupos productores y comercialización de sus productos en conjunto, lo que va a permitir acelerar los procesos de formalización, que es una de las grandes tareas que tenemos”, concluyó.
