18 marzo 2010 | 06:47 pm Por: Arturo Córdova apellido | editor@agraria.pe

Agricultores esperan pronunciamiento del Ministerio de la Producción

CAFÉ AMARGO PARA LA SUNAT

CAFÉ AMARGO PARA LA SUNAT

Agraria.pe.- La SUNAT desconoce el sistema de pago que tienen -desde hace 45 años- las cooperativas con sus asociados (pago en bonos por las ventas de las cosechas, recién al término de la campaña agrícola).

Grave sería el impacto que tendría la desactivación de estas cooperativas en las regiones del Valle del Río Apurímac, informó Rivas, quien detalló que se perderían 130 mil Has de cultivos, de las cuales, 60 mil Has han sido certificadas como producción orgánica, afectando a un total 50 mil familias de pequeños agricultores de café y cacao.

Ante esta situación, Rivas indicó que apelarán ante la instancia regional de la SUNAT, la cual tendría que enviar auditores a la zona del río Apurimac, y de no encontrar solución, llegarán –advierte- hasta el organismo nacional.

La fuerza de la ley

Una posible y definitiva solución –para los agricultores cafetaleros – estaría en manos del Congreso de la República. Rivas señaló que las cooperativas están pendientes que la Comisión de Economía del Congreso apruebe el proyecto ley sobre aclaración del acto cooperativo, dicha aclaración corresponde a la Ley General de Cooperativas, aprobada por Decreto Legislativo N° 085. Una vez que la comisión apruebe el proyecto, y pase al Pleno, se tendrá una norma que encauce a la SUNAT a la forma adecuada de intervenir.

ALERTA DE CRISIS

Señaló, también, que el café y el cacao, sirven para enfrentar la producción de cultivos ilícitos. De darse la desactivación de las cooperativas, estos ilícitos volverían a emerger y retornaría la inestabilidad social en estas regiones.

Finalmente, destacó que el JNC espera que la Defensoría del Pueblo y el Ministerio de Producción se pronuncien sobre este tema, siendo el papel de este último apoyar a las cooperativas.
 
DATOS: 

 

  •  Los rendimientos del café y del cacao, en esta región, son de 650 Kg y 450 kg por hectárea, respectivamente.