Ex presidente de Sierra y Selva Exportadora explica que en dicho país se siembra el berry, lo que ha creado una cultura de consumo. Observó además que hay ventanas comerciales importantes que el país puede aprovechar cuando otros productores no despachan.
(Agraria.pe) Cree en el producto. Así se puede definir la actitud de Alfonso Velásquez, ex presidente de Sierra y Selva Exportadora, con respecto a la frambuesa. Días atrás, durante su participación en la charla “El crecimiento frutícola del Perú, un nuevo y promisorio rubro: Las frambuesas” en Expoalimentaria, destacó que la producción mundial de este fruto al cierre de 2018 bordearía las 540 mil toneladas, es decir un 10 por ciento menos que la producción del año anterior, lo que representa una oportunidad para nuevos proveedores.
En ese sentido, recordó que entre fines de agosto y principios de septiembre existe una gran ventana comercial, ya que Estados Unidos finaliza su cosecha, y Chile, que es el gran productor de Sudamérica, aún no la inicia para ese momento.
"Actualmente Senasa está coordinando con la autoridad sanitaria de Estados Unidos para permitir el ingreso de ese berry al mercado estadounidense, pero en primera instancia, los mercados potenciales son Chile, Brasil, Colombia, entre otros", dijo el también ex presidente de ADEX.
Comentó que Chile tiene cerca de 9.000 hectáreas de frambuesa, pero que últimamente se está reduciendo por un tema de calidad de plantas, lo que también es una oportunidad para posicionar nuestro berry en el mercado internacional, ya sea fresco o procesado.
Opinó también que el mercado chino es el que se debe conquistar pues ya existe una cultura de consumo. "China siembra frambuesa, lo cual motiva su consumo interno, como sucede con el arándano que ingresó a ese mercado en febrero del 2017", explicó.
Asimismo, en el mercado interno existe una gran oportunidad ya que los peruanos la demandarían por su sabor y sobre todo porque es un gran antioxidante. "La frambuesa es una gran fuente de proteínas, calcio, vitamina C, entre otros. Además, hay estudios que demuestran que ayuda a prevenir el cáncer de mama, de próstata y colorrectal", añadió.
Por otro lado, el directivo resaltó que las primeras siembras realizadas en nuestro país, señalan un potencial productivo de hasta 5.000 kilos por hectárea en el primer año de cosecha, lo que indica que se puede entrar al mercado tanto con el fruto convencional como con el orgánico.
"La producción de los países productores en el mundo se da gracias al trabajo de medianos y pequeños agricultores, lo que en Perú deberíamos imitar a través de la asociatividad que permitirá la participación del pequeño agricultor nacional. Podemos diversificar exitosamente el agro mediante un cultivo rentable, que necesita por supuesto un adecuado manejo técnico, siendo una excelente oportunidad de promoción público-privada", concluyó.