(Agraria.pe) Tras la salida de Javier Arce del cargo de ministro de Desarrollo Agrario y Riego, algunos nombres han empezado a sonar como reemplazo en un escenario complejo para el país que implica la posibilidad de que más de 15 millones de peruanos sean afectos por la crisis alimentaria global, tal como informó la FAO recientemente. Por ello, la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP) ha solicitado que la próxima designación en el sector esté a la altura del desafío.
A través de un comunicado, el gremio adelantó que Perú ya está sufriendo una crisis alimentaria, la cual se ve profundizada por altos costos de fertilizantes, fletes, insumos agrarios y “por el mal manejo del país y denuncias de corrupción por parte de las autoridades responsables del sector (agrario)”.
En esa línea, exigió que, ante la renuncia reciente de Arce, se nombre en el Midagri “a una persona que cumpla con los requisitos necesarios para poder afrontar la peor crisis alimentaria que afecta a todo el sector agrario, principalmente a los pequeños productores, quienes vienen luchando día a día por subsistir e impactando a toda la ciudadanía”.
Propuestas
Cabe recordar que Javier Amaro, director ejecutivo de AGAP, propuso recientemente enfrentar la crisis de fertilizantes con acciones de gobierno a gobierno, empezando con productores globales con quienes Perú tiene Trataos de Libre Comercio como Estados Unidos, China y Canadá.
Otro punto que pidió considerar fue aplicar fondos de garantía para disminuir el costo del crédito agrario, disminución de costos de importación y ayudar a la pequeña agricultura para integrarla a las cadenas modernas agrarias.
Asimismo, señaló que se deben disminuir y eliminar los sobrecostos que afecten los procesos logísticos de la cadena y la tramitología pública, mejorar la regulación agraria devolviéndole su carácter promotor e incrementar la competitividad del sector agrario.
Además, pidió fortalecer el comercio de alimentos; evitar toda restricción injustificada al comercio internacional y a nuestros socios comerciales (TLC); eliminar barreras y obstáculos al comercio internacional de los insumos agrarios, etc.
“El Estado debe actuar con urgencia y responsabilidad. Esta crisis es una de varias que enfrenta el sector agrario, desde la pequeña unidad productiva hasta la grande. Si no se toman las medidas adecuadas y se ejecutan rápidamente se avecina una crisis social mayor”, señaló Amaro.