La comisión multisectorial promovida por el ejecutivo para discutir el tema de los transgénicos ha devenido en ser una comisión multipropósito puesto que cumple varias funciones. Primero le da la excusa perfecta al congreso para no debatir la moratoria a los transgénicos; luego elimina una posible “bandera de oposición” que pudo enarbolar Gana Perú en las elecciones; tercero consigue la pasividad de CONVEAGRO (Director de Agrobanco en adición) y hasta tiene a un importante Gremio de Exportadores pidiendo ser invitado a la fiesta, quizá porque le preocupa que solo hayan invitado a quien normalmente anima la “reu” COMEX.
Una comisión que tendrá cuatro semanas para reunirse. Lo más probable es que haya cuatro reuniones de dos horas cada una (no van a descuidar sus actividades particulares) en la primera sesión se presentan y discuten la metodología a seguir, en la segunda sesión intercambian una hoja de posiciones, la tercera semana se resume lo avanzado y la cuarta semana se presentan las conclusiones que no hará más que enumerar las posiciones de cada entidad participante. Entregarán el documento al Ministerio, el cual será presentado por el Ministro Villasante en conferencia de prensa dándole el matiz que quiera darle y listo: nos quedamos con el DS 003 – 2011 – AG.
Me queda claro que el gran interés de sacar adelante el ingreso de los transgénicos tuvo su epicentro en el mismo palacio de gobierno. Si el Presidente no hubiera tenido mucho ímpetu en el tema, no se hubiera contrapuesto a un importante líder de opinión como Gastón Acurio. Aunque después pudo más su cálculo político e hizo borrón y cuenta nueva.
Nunca creí que el Señor Quevedo tenga un interés subalterno en el tema, pues los avicultores sencillamente estaban tranquilos importando el maíz transgénico sin alborotar el gallinero. El Ministro Brack tampoco es de las personas que suelen tener “mala praxis” pero probablemente al igual que el Oidor Zárate tuvieron tres motivos importantes para darle luz verde al cuestionado decreto.
Espero que el congreso apruebe una moratoria de cinco años para los transgénicos y que la comisión multisectorial conformada sugiera redactar un nuevo Decreto Supremo, para que solo quede la parte del control y no ingresen simientes transgénicas al país y para que se permita la investigación.
Esta semana está perdida pues las cabezas están concentradas en la elección del domingo. Gane quien gane por favor no hagamos un sector público más grande (más fuerte sí, pero con menos entidades). Ayer nuevamente perdí una hora haciendo cola en el Banco de la Nación (Av. Benavides) para llegar a la ventanilla y que me digan que no hay sistema. “Siempre pasa lo mismo” era la queja generalizada.
No entiendo cómo seguimos pidiendo más ministerios o regresar a la época del estado empresario. El Banco de la Nación debe desaparecer y ser reemplazado por la banca comercial con un subsidio específico para que se abran agencias privadas allí donde normalmente no llega el sector financiero.
Lima, 02 de Junio del 2011