(Agraria.pe) En su discurso de presentación ante el XI Congreso Mundial de la Papa que se celebra en Dublín (Irlanda), el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), QU Dongyu, señaló que las papas podrían contribuir aún más a la historia del mundo y la seguridad alimentaria mundial y en los próximos 10 años se podría duplicar la producción total de este cultivo alimentario.
Las papas suponen el tercer cultivo alimentario más importante del mundo y miles de millones de personas las consumen de forma regular. También generan ingresos para los productores en pequeña escala, constituyen una fuente de hidratos de carbono saludables, con bajo contenido de grasa y alto contenido de fibra, son ricas en antioxidantes y nutrientes y producen menos emisiones de gases de efecto invernadero que otros cultivos importantes, declaró QU Dongyu, reconocido experto en este cultivo alimentario. Al inicio de su carrera, ayudó, entre otras cosas, a organizar el Congreso Mundial de la Papa de 2015 en China y fue fideicomisario del Centro Internacional de la Papa.
La papa, cuyos orígenes genéticos se encuentran en América del Sur, se cultiva hoy en día en más de 20 millones de hectáreas en 150 países y en 2020 su producción mundial total ascendía a 359 millones de toneladas. El director general señaló que, si se hacía hincapié en mejorar el rendimiento y aprovechar plenamente las superficies históricas de cultivo de la papa, la producción en todo el mundo podía aumentar a 500 millones de toneladas en 2025 y a 750 millones de toneladas en 2030.
“La papa se convertirá en uno de los cultivos ventajosos en el sistema de la seguridad alimentaria mundial cuando el rendimiento de otros cultivos de cereales se acerque a su límite”, afirmó QU.
Al tiempo que elogió el ingenio de los pueblos de Bolivia y el Perú que domesticaron la papa, el director general señaló que África y Asia eran las regiones que presentaban el crecimiento más rápido de producción de papa en la actualidad, en tanto que en América del Norte y Europa la producción estaba disminuyendo. En el plano mundial, se ha registrado un aumento de la producción de papa aun cuando las tierras dedicadas a su cultivo han disminuido, lo que pone de relieve el papel de la mejora del rendimiento, manifestó QU Dongyu.
Camino por recorrer
El director general exhortó a múltiples asociados a que ayudaran a “mejorar considerablemente” los sistemas agroalimentarios de la papa en los planos nacional, regional y mundial.
Tras señalar la importancia de proporcionar empleo rural decente, ofrecer alimentos nutritivos y hacer hincapié en la necesidad de políticas, planes y medidas inclusivos, hizo un llamado para que se aumentara el apoyo a las mejoras genéticas de la papa y la reducción de los ciclos de mejoramiento de las variedades de papa, así como el valor potencial de los sistemas de semillas libres de virus.
El banco de germoplasma del Centro Internacional de la Papa en Lima (Perú) conserva más de 7.000 variedades nativas diferentes y parientes silvestres, que presentan una gran diversidad de rasgos, en particular la capacidad de adaptarse a distintos entornos de producción y resistir a diversas plagas y enfermedades. QU destacó que las necesidades relativamente escasas de recursos naturales de la papa la convierten en un importante cultivo alimentario para la supervivencia de las personas durante las hambrunas y operaciones de socorro en casos de catástrofe.
Asimismo, indicó que en China las papas se consideraban el cultivo preferido para aumentar los ingresos y reducir la pobreza y señaló que la distribución espacial de la planta en el país correspondía aproximadamente a la de zonas anteriormente pobres, especialmente en áreas montañosas.
Fuente: fao.org