(Agraria.pe) Los mercados, parte final de la cadena alimenticia que provee el 80% de los alimentos de los peruanos, están empezando a cerrar porque no se ejecutaron los procesos sanitarios y ya tienen casi 60% de infectados. Si bien ello dependía de las municipalidades distritales (Ley 27972, Art 80, inciso 3.2) la responsabilidad recae además en varios sectores.
Así lo señaló el ex viceministro de Desarrollo e Infraestructura Agraria y Riego del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), Jaime Salomón Salomón, quien dijo que uno de los sectores en los que recae dicha responsabilidad es el de Agricultura que, si bien a fin de marzo ofreció supervisar que se cumplan los protocolos sanitarios, esta semana manifestaron que "no esperaban encontrar tantos contagiados" y anuncia [recién] que "están elaborando estrategias para garantizar el abastecimiento de alimentos".
“Este anuncio lo realizan cuando ya se cerraron 21 mercados, hay 15 más en camino y, sin hablar de los casi 2000 mercados a nivel nacional que tienen baja o nula supervisión sobre el cumplimiento de los protocolos sanitarios", sostuvo.
Asimismo, dijo que el Minagri señala que los mercados se abrirán o se reubicarán durante la próxima semana, sin embargo, esto no sería así ya que las personas que trabajaban en dichos espacios se mantendrán en sus casas (u hospitales) por al menos 15 días hasta recuperarse.
En otras palabras, se cortará la cadena alimenticia porque los mercados son el eslabón final y, el hecho de que paralicen, significa que en pocas semanas los agricultores no tendrán a quién vender sus productos y dejarán de sembrar para la siguiente campaña".
El exviceministro manifestó que, por lo antes expuesto, la población debería prepararse para un desabastecimiento de alimentos en el corto plazo. Además, el Estado debiera mejorar el sistema de mercados itinerantes (llamados “De la chacra a la olla”) que se vienen realizando sin cumplir el cronograma planteado, sin llegar a todos los distritos del país y donde el proveedor se tiene que registrar por la web.
“Es el Estado quien, garantizando la demanda y el pago justo, debiera adquirir los productos directamente a los agricultores, generar almacenes de acopio y acercarse al pueblo a través de mercadillos cada 10 cuadras, en coordinación con los municipios", aseveró.
Remarcó que se debería implementar el bono social productivo para empleos temporales (descolmatación de canales, huertos familiares, producción de pacas, adquirir semillas y fertilizantes, entre otros). Atender a los trabajadores agrarios informales, que son el 98 % del total, que no reciben atención del Estado (ni beneficios ni servicios sociales y que no están en lista alguna de los que recibirán el famoso bono rural) y a las familias agrarias formales, de las cuales el 46% está en condiciones de pobreza monetaria.
Jaime Salomón sugirió como alternativa a esta situación, que a mediano plazo dejen las estrategias defensivas y tracen estrategias ofensivas que permitan mantener la seguridad alimentaria y generar el desarrollo justo de la agricultura, con inclusión social e igualdad.
“Promuevan la productividad agrícola. Tracen las cadenas productivas priorizadas por región, integrándolas desde el agricultor hasta el cliente final. Aseguren al agricultor el acceso a recursos (agua, energía y sistemas de protección social). Fortalezcan la asociatividad (horizontal y vertical) para mejorar la gestión y organización agraria, y para que atiendan al mercado de manera colaborativa”, pidió.
Además, indicó que se deberá estar atentos a los fenómenos climáticos que afectan al agro de manera cíclica y anual (como las heladas en la sierra y friajes en la selva) y no se han planificado acciones. “Aseguren que la infraestructura esté alineada a las cadenas productivas priorizadas por regiones, y no gastar en proyectos que no agregan valor a la agricultura".
Finalmente, dijo que se requiere elaborar una sola base de datos actualizada, que permita saber quiénes son los agricultores. A ello añadir la relación de miembros de toda la cadena alimenticia del país y de los actores involucrados (municipios, gobernadores, ministros, congresistas, gremios, entre otros) buscando que trabajen conjuntamente para el bienestar del país.
“Promuevan y garanticen la seguridad alimentaria, empiecen a mostrar acciones. La agricultura y la ciudadanía requieren que los alimentos no dejen de fluir hacia los peruanos, si queremos papeo a futuro, no abandonemos al agricultor. Para asegurar la futura seguridad alimentaria del Perú se requiere evaluar el sector, se requiere más liderazgo, más decisiones inteligentes y menos protagonismo. Trabajen por los agricultores que son la despensa del Perú”, finalizó.