Según Kenlly Mora Vargas, ingeniera líder en responsabilidad social productiva de SIPAS, la nueva versión de la norma establece tres figuras para que todos los factores de riesgo en la producción se encuentren controlados, independientemente que sean propios o subcontratados
Por: Raúl Yaipén Carranza
Lima, 05 Junio 2012 (Agraria.pe) El curso internacional de buenas prácticas agrícolas, enfocado en la nueva versión 4.0 de la certificación Global G.A.P, organizado por el Instituto Peruano de Mercados Alternativos (IPMA) y la consultora internacional de Servicios Integrales Para la Prosperidad Ambiental Solidaria (SIPAS), culminó con éxito, tras tres días de capacitación en las instalaciones de Agroideas.
De acuerdo con una de las expositoras, Kenlly Mora Vargas, ingeniera líder en responsabilidad social productiva de SIPAS, el curso ha logrado desarrollar capacidades en reglas generales de la nueva versión, elaboración y corrección de los sistemas de gestión, requisitos específicos aplicables a todo tipo de producción, manejo de desechos, trazabilidad, fertilización, plagas; entre otros.
Prevenir, antes que lamentar
Por otra parte, teniendo en cuenta que el 37% de los productos peruanos que son rechazados en el proceso de exportación se debe a la falta de trazabilidad e inocuidad de los cultivos, Kenlly Mora sostuvo que estos rechazos se podrían evitar, implementando de manera eficiente la certificación Global G.A.P, la cual se encuentra enfocada en temas preventivos que involucran la evaluación de incumplimientos, identificación de las estrategias de control; resultados esperados y evaluación de riesgos.
“En la agricultura siempre van existir riesgos controlables y no controlables, por el tipo de producción que se maneja, pero la clave del éxito se encuentra en establecer los sistemas de monitoreo que rastreen todos los procesos de producción (siembra, manejo, cosecha, transporte y empaque)”, precisó.
Las tres nuevas figuras del Global G.A.P v4.0
Según Mora Vargas, esta nueva versión de la norma Global G.A.P v4.0 ha desarrollado tres figuras para que todos los factores de riesgo en la producción se encuentren controlados, independientemente que sean propios o subcontratados, basándose en la metodología del Sistema de Análisis de Peligros y de los Puntos Críticos de Control (HACCP).
1. La primera sería mediante un requisito de control de las actividades tercerizadas, teniendo en cuenta la evaluación de la competencia del subcontratista, asegurarse que cumpla con todos los requisitos de la norma, siendo responsabilidad del productor para la certificación.
2. La segunda figura establece que en los diferentes servicios que adquiera la empresa en el proceso productivo sean centralizados, puesto que hoy la versión 4.0 permite a que este tipo de compañías puedan acceder, de manera independiente, a una certificación compatible con Global G.A.P. y entregarla hacia el productor como acompañamiento para su certificación.
3. Y la tercera figura se aplicaría solo para el servicio de empaque subcontratado, teniendo en cuenta que la anterior norma solo establecía la certificación para los procesos productivos primarios, “hoy se puede dar que las empresas que brinden este servicio se puedan certificar y ser parte del proceso certificación global G.A.P. del productor”.
Finalmente, la especialista de SIPAS resaltó que, en la actualidad, la certificación Global G.A.P v4.0 es válido para todos los mercados de exportación y cada vez se hace más necesario para niveles de comercio local, por el incremento de los supermercados.
Datos
• A nivel mundial, los productos con mayor cantidad de certificaciones Global G.A.P son las manzanas y las papas.
• Para tener en cuenta, en Chile crearon, hace más de diez años, una normativa denominada Chile G.A.P. que involucra a todos los sectores y que se adhiere a todos los cambios establecidos por la norma a nivel mundial.