239 alcaldes firmaron convenio con el ministerio para mejorar la calidad de forrajes e incrementar la producción de carne y leche en 18 regiones.
(Agraria.pe) Para potenciar el sector pecuario con el propósito de convertir al Perú en una potencia ganadera y lechera, el Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) firmó un convenio con 239 alcaldes de 18 regiones para alcanzar al 2021 las 150 mil hectáreas de pastos cultivados entre Sierra y Selva.
La alianza estratégica entre el Minagri y los gobiernos locales permitirá promover la siembra, manejo como conservación de pastos y forrajes para mejorar las condiciones de vida de más de 1.8 millones de familias en 239 distritos a nivel nacional, la mayoría ubicados en zonas geográficas por encima de los 3,000 metros sobre el nivel del mar donde los niveles de pobreza superan el 30% y existen riesgos de bajas temperaturas.
Según reveló el ministro del sector, José Manuel Hernández, la promoción de la ganadería en el país “nos permitirá dar un gran salto en la solución de la problemática del campo porque dará mayores ingresos a los pequeños criadores de ganado (vacuno, ovino y camélido), principalmente, de las zonas altoandinas”.
De la misma manera, el Ministerio tiene previsto a través del presente convenio elevar la calidad del ganado y ofrecer al público consumidor leche, quesos y carnes de primera calidad, promoviendo el emprendimiento, el cambio de los sistemas de producción y por ende, elevar la calidad de vida de la población rural.
Hernández recordó que una de las primeras medidas adoptadas al inicio de su gestión, fue la creación de la Dirección General de Ganadería del Minagri para impulsar la siembra y cosecha de pastos y forrajes, en estrecha articulación con los gobiernos locales y productores, “lo que ha favorecido dinamizar la producción ganadera en zonas rurales”.
Ganadería intensiva
Por ejemplo, el ministro citó el caso de la localidad de Puyusca (Ayacucho), situada a más de 3,300 metros sobre el nivel del mar, donde inicialmente se han sembrado 800 hectáreas de pastos cultivados (alfalta dormante), pero la meta es llegar a colocar 25 mil hectáreas.
La ganadería es la principal fuente de ingresos de familias pobres y la meta es lograr el desarrollo rural sostenido, mejorando el piso forrajero y generando negocios locales. Por ello, el Minagri viene implementando el Plan Ganadero como instrumento de política que permitirá el despegue de la ganadería para los próximos 10 años (2017-2027).
“Se trata de un documento orientador que plantea estrategias basadas en la experiencia de las tendencias globales, enfoque territorial, de inclusión y de desarrollo sostenible, buscando mejorar la competitividad de las crianzas de vacunos, ovinos, camélidos y animales menores, que constituyen la principal fuente de ingresos de las familias de las zonas andinas”, subrayó el ministro.
Para fines de este año, la estimación del sector es cerrar con 42 mil hectáreas de pastos cultivados, cifra superior a las 35 mil hectáreas establecidas como meta inicial.
Pero con miras al 2021, el Minagri se ha propuesto potenciar la siembra de pastos y llegar a 150,000 hectáreas en la Sierra y Selva del país.
Marca de queso
De la misma manera, el ministro subrayó que el Ministerio también impulsará 40 mil pajillas y el mejoramiento genético del ganado a través de 1,000 embriones de alta calidad, que favorecerá la incorporación de ganado de primera línea en beneficio de los pequeños criadores del campo.
Hernández expresó que no solo de busca potenciar la producción de leche y carne sino también productos derivados como quesos, bajo una sola marca, donde el Ministerio buscará abrir y conquistar mercados para los pequeños productores, “lo que incrementará sus ingresos y una mejor calidad de vida para sus familias”.
El acto celebrado en el auditorio del Ministerio en La Molina, también participaron la ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ana María Choquehuanca; el viceministro de Desarrollo e Infraestructura Agraria y Riego, Jaime Salomón; el director general de Ganadería, Alberto Barrón; el alcalde del Cusco, Carlos Moscoso y el consejero presidencial, Máximo San Román, entre otras autoridades.