(Agraria.pe) Una de las principales inquietudes era si los alimentos podían ser un peligro para las personas; o qué medidas se podían tomar para eliminar dicha posibilidad.
En particular, como se podía reducir riesgos en la cadena de transporte, la que, además, ya se encuentra bajo presión debido a falta de contenedores, personal y las diversas medidas implementadas por los países para limitar el cruce de fronteras.
En esa línea el ozono ha surgido como un elemento desinfectante que tiene la capacidad de sanitizar superficies cargadas con virus.
Lo anterior se presenta como una iniciativa que no solo permite facilitar el proceso de inocuidad sanitario, tan clave en la industria, sino, además, aliviar temores en los consumidores.
De hecho, estos últimos han dado un vuelco hacia los productos congelados durante el curso de esta pandemia, lo que ha inquietado al sector fresco de la industria.
Rick Wilson de Purfresh, empresa que trabaja con el ozono como elemento sanitizante en sus ambientes de atmosfera controlada, explicó que usarlo les permite eliminar patógenos microbianos, incluidos virus como COVID-19, bacterias y moho en el recipiente.
Wilson señaló que en su caso inyectan ozono en los containers hasta que la fruta llega a destino.
De acuerdo con lo indicado por el representante, “el ozono es oxígeno electrificado”; y al ser un desinfectante libre de residuos, vuelve inmediatamente al oxígeno después de hacer su trabajo.
“Debido a que es un gas, toca cada pieza de fruta y cada grieta en el contenedor”, añadió.
Lo anterior garantiza que la fruta en destino estará libre de virus y otros patógenos microbianos.
Afirmó que en Purfresh no utilizan productos químicos como desinfectantes y que, hasta el momento, son los únicos que utilizan el ozono como parte de la tecnología de atmósfera controlada.
La “tecnología reduce la deshidratación, mantiene la firmeza y el color, mantiene el sabor y reduce la descomposición”, destacó.
Fuente: Portalfrutícola