(Agraria.pe) La producción y exportación de arándanos de Perú venía creciendo de manera veloz en los últimos años, sorprendiendo al mercado y eliminando gran parte de su competencia. Un crecimiento logrado de la mano de las nuevas variedades genéticas vegetales, que le han permitido a la industria peruana mantener una consistente oferta de fruta de mejor calidad, mayor calibre y buen sabor, satisfaciendo gran parte de las altas exigencias de los consumidores.
En la temporada 2021-2022, la industria peruana colocó 222.978 toneladas en los distintos mercados del mundo, especialmente en Estados Unidos. Luego, en la campaña 2022-2023, los envíos peruanos de arándanos frescos a los mercados del mundo llegaron a las 286.224 toneladas, consolidando una tendencia al alza con aumentos importantes.
Crecimiento no era eterno
Esto llevó a proyectar el pasado 5 de julio un volumen de envíos de 325.856 toneladas para la actual temporada 2023-24, superando en un 14% la cifra de la campaña anterior. Sin embargo, la amenaza climática y específicamente la del fenómeno meteorológico de El Niño obligó a rectificar drásticamente esta cifra y el 10 de agosto se fijó en 272.938, lo que equivale a un -5% respecto a la campaña 2022-23.
La llegada de El Niño ha impactado en el ritmo de producción a raíz de las alzas de temperatura, las que se han elevado entre 4°C a 5°C por encima del promedio histórico, afectando el aspecto fisiológico de las plantas, retrasando su floración, entre otros efectos.
Producción retrasada
Los resultados del efecto climático y meteorológico han sido dispares por región, por granja y por variedad, siendo Ventura, la variedad con mayor superficie plantada y mayor proporción en las exportaciones, la más afectada hasta el momento.
El pasado 3 de septiembre se hizo una nueva proyección para la campaña peruana 2023-2024 y se estableció un total de 256.481 toneladas en envíos a los mercados, lo que equivaldría a un -10% por debajo de los resultados pasados. Incluso algunos se aventuraron a pronosticar que la industria peruana decaería en un 15% los volúmenes en esta campaña, provocando un alto impacto en los precios actuales de los arándanos en el mercado internacional.
Se endereza la caída
La última proyección de la industria peruana para la campaña 2023-2024 se realizó este 1 de octubre y alcanza las 260,582 toneladas, lo que baja a un -9% la merma de producción y exportación de esta campaña, por lo que no sería sorprendente que esta tendencia a la baja se acortara aún más, aunque en la semana 38 (domingo 17 de septiembre) la cifra era de solo 56.421 toneladas, equivalente a un -56% respecto a la campaña pasada.
Para los últimos dos trimestres, que van desde noviembre 2023 a abril 2024, según la Proyección de la Asociación de Productores de Arándanos del Perú (Proarándanos), se esperaría una recuperación en los volúmenes de exportación. Sin embargo, estaría sujeta a la evolución del clima durante las próximas semanas. Aún hay incertidumbre en la intensidad del fenómeno de El Niño hacia la última etapa del año, lo cual será determinante en los volúmenes que se exporten en estos meses.
La actual campaña se puede acercar en resultados a la temporada pasada porque, si bien es cierto que la variedad Ventura representa un 35% de la producción peruana y ha sido una de las más afectadas, las nuevas variedades ingresadas a la producción peruana son mucho más productivas y ofrecen un alto rendimiento, además de una mejor calidad de la fruta.
La presente proyección fue realizada gracias a la información de empresas asociadas y no asociadas a Proarándanos (34 empresas en total) que en conjunto viene representando el 91.13% del total exportado en la campaña 2023-24 (hasta semana 38). Para el porcentaje restante se realizó una estimación tomando en consideración una distribución semanal, por destino y por región similar al resto.
Fuente: Blueberries consulting