(Agraria.pe) Con el firme compromiso de promover la producción de alimentos agropecuarios inocuos provenientes de la Agricultura Familiar, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), ha formado 79.050 productores como expertos en la adopción de Buenas Prácticas Agrícolas, en todos los departamentos del territorio nacional.
La estrategia utilizada por el Senasa contempla la metodología internacional “Aprender haciendo”, de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), a través de la implementación de “Escuelas de Campo”, espacios de aprendizaje que agrupa a hombres y mujeres del campo, interesados en producir alimentos sanos e inocuos para su propio consumo y comercialización.
Desde 2019, en el Perú se han implementado 3.980 Escuelas de Campo; cada jornada de aprendizaje se desarrolló por 6 meses, logrando orientar y formar al pequeño productor desde la identificación de las potencialidades del uso eficiente de la tierra, el uso de semilla de calidad, y, además, acercándolos al uso de agentes biológicos, como método principal y alternativo para el control de plagas en sus cultivos, para así cosechar alimentos sin residuos de plaguicidas químicos.
En el caso de la presencia de las plagas agrícolas en las zonas de intervención, también se orienta a los productores en el buen uso de manera responsable de los plaguicidas agrícolas; y, además, se les explica sobre la importancia de respetar el periodo de carencia, (tiempo que debe transcurrir desde la última aplicación hasta la cosecha) de tal modo que garanticen la producción de alimentos sanos e inocuos.
Desarrollo de la Agricultura Familiar
Durante los últimos años, la participación de la agricultura familiar es clave en diversas cadenas productivas que han tomado protagonismo en el “boom agroexportador” que ha tenido el país, lo que ha posicionado al Perú como uno de los principales proveedores de alimentos en el mundo.
Entre los casos más destacados se encuentran los pequeños productores de palta, quienes hoy en día producen desde los valles interandinos más alejados del país, como es el caso Huancavelica, Cusco, Apurímac, Ayacucho y Áncash.
Otra cadena importante en el país es la que produce mango; en este caso, la pequeña agricultura produce el 88% de lo que se exporta, principalmente desde Piura, Lambayeque y Áncash, regiones ubicadas en la costa peruana.
También es importante considerar la participación de la agricultura familiar en la producción orgánica de limón (Piura), jengibre (Junín) y banano (Piura), productos peruanos que siguen consolidándose en diversos mercados del mundo, generando una mayor rentabilidad para los pequeños productores y mejorando la calidad de vida de sus familias.